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Invitación de último minuto de ONU a Irán deja en duda negociaciones sobre Siria


 
Reuters

NUEVA YORK / ANKARA.- Una inesperada invitación de último minuto de la ONU a Irán para que asista a la conferencia de paz sobre Siria puso en duda el lunes la realización de las negociaciones, luego de que Washington demandara que el secretario general Ban Ki-moon retire su oferta y la oposición amenazara con no participar.

Irán es el principal respaldo extranjero del presidente sirio Bashar al-Assad y su presencia ha sido uno de los temas más polémicos en los preparativos para las primeras negociaciones a las que asistiría tanto el Gobierno como sus opositores y que deberían comenzar el miércoles en Suiza. Pero diplomáticos dijeron que la reunión peligraba.

"¿Ginebra ocurrirá? Esa es la pregunta que en este momento no podemos contestar", dijo un diplomático occidental.

Tras las reacciones a su invitación, Ban dijo que se estaban desarrollando discusiones "intensas y urgentes".

Assad, en tanto, dijo que podría buscar la reelección este año, con lo que desecharía cualquier posibilidad de negociar su salida del poder, que es la principal exigencia de sus enemigos.

La invitación de Ban pareció sorprender a las potencias occidentales. Estados Unidos y Francia dijeron que Irán no es bienvenido a las conversaciones, a menos que respalde públicamente un acuerdo alcanzado en Ginebra en el 2012 que llama al establecimiento de un Gobierno de transición en Siria.

Ban dijo que había cursado la invitación después de que el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, le dijo que Teherán había aceptado el acuerdo del 2012.

"El ministro de Relaciones Exteriores Zarif y yo acordamos que el objetivo de las negociaciones es establecer un órgano de gobierno transicional por consentimiento mutuo con poderes ejecutivos completos", sostuvo Ban.

"El me ha asegurado que al igual que todos los otros países invitados al día de apertura de discusiones en Montreux, Irán entiende que la base para las negociaciones es la implementación completa del comunicado de Ginebra de junio del 2012", agregó.

Pero esto puso en entredicho la posición de la ONU y las potencias occidentales.

"Esto es algo que Irán nunca ha hecho públicamente y algo que hemos dejado claro desde hace mucho tiempo que es necesario", afirmó la portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Jen Psaki, en un comunicado.

"Si Irán no acepta completamente y públicamente el comunicado de Ginebra, la invitación debe ser rescindida", agregó.

Polémica

La Coalición Nacional, que es el principal grupo de la oposición siria en el exilio y que accedió a asistir a la conferencia conocida como Ginebra 2 hace sólo dos días, dijo que ahora no concurrirá, a menos que se retire la invitación a Irán.

"La Coalición Siria anuncia que retirará su asistencia a Ginebra 2, a menos que Ban Ki-moon rescinda la invitación a Irán", sostuvo la entidad en un comunicado en Twitter, citando al portavoz de la Coalición Nacional, Louay Safi.

"Vamos a dar plazo hasta las 1900 GMT para que la invitación sea retirada", declaró a Reuters Anas Abdah, miembro del comité político de la Coalición Nacional Siria.

Ban dijo que su invitación se basó en que el ministro Zarif le dijo que "Irán entiende que la base de las

conversaciones es la implementación total del comunicado de Ginebra del 30 de junio del 2012".

Sin embargo, Irán afirmó que asistiría a las negociaciones sin haber aceptado precondiciones, aparentemente firme en su postura de larga data.

"Poner esta condición para aceptar el acuerdo Ginebra 1 para estar presentes en Ginebra 2 es inaceptable y rechazada", dijo el funcionario según lo citó la agencia ISNA.

"Irán irá a las conversaciones sin ninguna precondición, en base a una invitación del secretario general Ban Ki-moon", agregó.

Rusia, que desde hace tiempo ha presionado para que Irán asista a las negociaciones y que ha criticado a la oposición y a Occidente por oponerse a la presencia de Teherán, afirmó que no tenía sentido hacer una conferencia sin ese país.

"No asegurar que todos los que influyen directamente en la situación estén presentes sería, creo, un error imperdonable", dijo el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov.

Arabia Saudita, principal respaldo de los rebeldes sirios, dijo que no se debería permitir que Irán vaya a las conversaciones porque tiene tropas en tierra ayudando a Assad. Pero no dijo que Teherán no debe estar presente o instar a la oposición a no presentarse a las conversaciones.
 

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