HOUSTON.- La tormenta tropical Harvey continuaba azotando a Texas por quinto día consecutivo, paralizando a Houston, en tanto el pronostico meteorológico advierte de más lluvias para los próximos días.
Soldados de la Guardia Nacional de Texas, bomberos, policías y cientos de voluntarios trabajan en el rescate de afectados, en tanto la ciudad se esfuerza por ponerse de pie y comenzar a realizar funciones básicas como la apertura de tiendas y negocios.
El alcalde de Houston, Sylvester Turner, dijo que la policía había rescatado a más de tres mil personas durante la tormenta, incluyendo mil el lunes, mientras que el cuerpo de bomberos de la ciudad informó que había recibido más de dos mil 300 llamadas de auxilio.
La Cruz Roja informó que el refugio más grande de la ciudad rebasó su capacidad la noche del lunes. En el Centro de Convenciones George R. Brown, se han recibido ya más de nueve mil evacuados y el flujo de gente que ingresa no ha cesado.
Miles de personas más han sido trasladadas a albergues en San Antonio, Austin y Dallas.
Sin embargo, las autoridades admiten la sombría realidad de que las muertes asociadas al huracán Harvey podrían subir de forma drástica una vez se retiren las inundaciones de uno de los núcleos metropolitanos más grandes del país.
A primera hora de este martes, Harvey seguía arrojando gran cantidad de lluvia sobre Houston y sus alrededores. Caía un centímetro de precipitación por hora sobre el condado Harris, donde está Houston, y más al este caían hasta 5 centímetros por hora.
El impacto de la tormenta se hacía sentir en Lake Charles, en el sudoeste de Luisiana, donde las cuadrillas de rescate estuvieron toda la noche sacando a gente de sus viviendas inundadas.
Se estima que la tormenta virará hacia el este hacia Mississippi para el jueves, con lo que Nueva Orleáns está en su paso. Las portentosas imágenes de la trayectoria de Harvey dominaban los radares, justo el doceavo aniversario del impacto del huracán Katrina en Nueva Orleáns.
Mientras tanto, la tormenta ganó algo de fuerza en su camino de vuelta hacia el Golfo, según el Centro Nacional de Huracanes.
Más de tres días después de que la tormenta asolara la costa de Texas como huracán de categoría 4, las autoridades sólo habían confirmado tres muertes, incluida una mujer fallecida el lunes cuando un gran roble cayó sobre su casa rodante en la pequeña localidad de Porter. Pero los reportes de personas desaparecidas o a las que se daba por muertas iban en aumento.
La zona está generando una cantidad de lluvia que normalmente sólo se veía una vez en más de mil años, indicó Edmond Russo, ingeniero de distrito del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, al que le preocupaba que las aguas rebasaran dos embalses de 70 años que protegían el centro de Houston.
Con información de Notimex y AP