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BEIRUT.- Fuerzas del Gobierno sirio realizaron ataques aéreos sobre un pueblo de Guta Oriental, en un esfuerzo por dividir en dos el enclave rebelde mientras intensifican una campaña para dar a la oposición su mayor derrota desde 2016.
El ataque del Gobierno sirio a la zona densamente poblada en las afueras de Damasco, que comenzó hace más de dos semanas, se ha convertido en una de las campañas más duras hasta el momento de una guerra que en 2018 cumple ocho años.
El grupo de monitorización Observatorio Sirio para los Derechos Humanos dice que 800 civiles han muerto en ataques gubernamentales con bombas y disparos.
Imágenes en vivo emitidas por la televisión estatal siria de las afueras del pueblo de Mesraba mostraron enormes nubes de humo en el cielo. Se podían escuchar los ruidos de las explosiones y los aviones.
Un corresponsal del canal de televisión estatal dijo que defensas militantes en el pueblo estaban siendo atacados por "fuego preparatorio" antes de una incursión de infantería.
Capturar Mesraba podría dividir Guta Oriental en dos después de días de una ofensiva terrestre, que llevó a las fuerzas del Gobierno a capturar casi la mitad del territorio, según el Observatorio, que dijo que unos 700 combatientes defensores del Gobierno habían llegado al frente como refuerzos.
En Douma, la principal ciudad de Guta Oriental donde los civiles de otras partes del área han buscado refugio, se escuchaba el sonido de los enfrentamientos en el frente, dijo un testigo a Reuters.
Naciones Unidas dice que 400 mil personas están atrapadas en las ciudades y pueblos de Guta Oriental, bajo asedio gubernamental durante años y que está prácticamente sin alimentos y medicamentos antes del ataque. Una caravana de ayuda llegó a la zona esta semana, pero funcionarios del Gobierno se quedaron con la mayor parte de los suministros sanitarios.