GUATEMALA.- El Juzgado específico para casos de Extinción de Dominio comenzó acciones contra bienes de la hija del expresidente Otto Pérez Molina (2012-2015), y un influyente militar retirado, en prisión por asesinato, informaron hoy fuentes judiciales.
El Ministerio Público (MP) de Guatemala solicitó al Juzgado de Extinción de Dominio el embargo de cuatro cuentas bancarias y otros bienes, cuyo monto se investiga, a nombre de Lissette Pérez Leal.
Las cuentas están vinculadas con una empresa propiedad de la hija del expresidente, que habrían recibido fondos del Estado en el gobierno de Pérez Molina, quien asumió el 14 de enero de 2012.
El mandato de cuatro años de Pérez Molina debía concluir en enero pasado, pero guarda prisión provisional desde el 3 de septiembre de 2015 cuando renunció, acusado de participar en la estructura de corrupción "La Línea", dedicada a la defraudación fiscal.
En otro caso del Juzgado de Extinción de Dominio se informó que también fueron embargados bienes del capitán retirado Byron Lima Oliva, en prisión desde hace 17 años condenado por la ejecución extrajudicial del obispo Juan Gerardi en abril de 1998.
El juzgado embargó un total de 41 bienes a nombre del reo Lima Oliva y familiares cercanos, incluidas casas, 15 vehículos y ocho caballos de raza.
De acuerdo con el MP, tras el embargo el juzgado comenzó el proceso de extinción de dominio que implica que los bienes y fondos originados en actividades criminales pasan a poder del Estado, que los distribuye entre instituciones de justicia y de seguridad.
El MP ha desarticulado estructuras de corrupción y golpeado al crimen organizado en investigaciones conjuntas con la Comisión Internacional Contra la Corrupción en Guatemala (CICIG), dependencia de Naciones Unidas.
Según el MP y la CICIG, Lima Oliva, recluido en la Granja Modelo de Rehabilitación Pavón, ubicada en el municipio de Fraijanes, próximo a la capital, es un reo peligroso e influyente, quien dirige desde prisión actividades del crimen organizado.
Lima Oliva, condenado en junio de 2001 a 20 años de prisión por la ejecución extrajudicial del obispo Gerardi ocurrida el 26 de abril de 1998, permanece en prisión.
Mientras que su padre, el coronel Byron Lima Estrada, y el cura Mario Orantes, también condenados, recuperaron en 2013 su libertad por una reducción de penas por buena conducta.
El otro sentenciado por la muerte del obispo Gerardi, cuya autoría intelectual no fue esclarecida durante el juicio, el especialista del Ejército, Obdulio Villanueva, murió en la cárcel durante un motín.
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