¿Cuán abierta fue Cuba tras apertura de Obama? Te lo decimos en 9 puntos

Como presidente de Estados Unidos, Barack Obama llegó a un acuerdo en 2014 para restablecer los lazos con Cuba después de medio siglo, argumentando que la apertura del estado-isla comunista al turismo y comercio estadounidense ayudaría a socavar al gobierno de un solo partido. Sus oponentes dijeron que estaba lanzando un salvavidas a una dictadura.

Dos años y medio más tarde, los estadounidenses son más libres de viajar y vender a Cuba, pero su gobierno no ha cambiado mucho. El "deshielo cubano", como algunos lo llaman, se enfrentaba a límites: restringido por un embargo comercial consagrado en la ley, Obama sólo podía utilizar los poderes ejecutivos para relajar las regulaciones relacionadas en áreas como los viajes, las telecomunicaciones y los servicios financieros.

Este viernes el presidente Donald Trump echó abajo la iniciativa de Obama argumentando que no es la manera correcta de asegurar la libertad para el pueblo cubano.

Hasta este fin de semana... ¿qué tanto había cambiado Cuba?

1. ¿Cuánto aumentaron los viajes?

Cuba recibió un récord de cuatro millones de turistas el año pasado de todo el mundo. Esto se debe en parte al aumento en los viajes de Estados Unidos debido a la relajación efectuada por Obama y la reanudación de los vuelos comerciales programados desde un puñado de ciudades de la costa este. Aproximadamente 285 mil ciudadanos estadounidenses visitaron la isla, un aumento de 74 por ciento con respecto a 2015, según el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba. Las autoridades cubanas esperan al menos 4.2 millones de turistas este año; tras el anuncio de Trump, aún no se han ajustado las proyecciones.

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2. ¿Es fácil viajar a Cuba ahora?

Aunque el gobierno de Obama facilitó que los estadounidenses visitaran Cuba, el embargo económico de décadas todavía prohíbe viajar a la isla fuera de 12 categorías exentas, como visitas culturales, religiosas o educativas. Especialistas del sector de viajes dicen que las restricciones continuas disuaden a algunos posibles visitantes.

Algunos cazadores de gangas han sido desalentados por la rápida inflación en los precios de los hoteles manejados por el estado, los taxis y otros servicios de viajeros provocada por el repentino interés en Cuba. Otro obstáculo: muy pocas tarjetas de crédito estadounidenses funcionan en Cuba porque los bancos que las emiten no tienen relaciones con contrapartes cubanas que puedan procesar las transacciones.

3. ¿Aumentó el comercio entre Estados Unidos y Cuba?

Sí. El embargo comercial a Cuba permite la venta de algunos bienes, principalmente productos agrícolas como aves de corral, soja y maíz. Las compañías estadounidenses exportaron a Cuba productos por aproximadamente 317 millones de dólares el año pasado, 37 por ciento más que en 2015, según el Fondo Monetario Internacional. Eso fue a pesar de que el comercio bilateral total de Cuba cayó el año pasado a nueve mil 700 millones, el nivel más bajo desde 2010, según datos del FMI. La caída se explica en parte por la primera recesión económica del país en más de dos décadas y el descenso de las importaciones de petróleo de Venezuela, al tiempo que la economía de ese país se colapsa. China y la Unión Europea son los principales socios comerciales de Cuba.

4. ¿Hay más inversión estadounidense en Cuba?

Las agencias estadounidenses no publican datos sobre la inversión extranjera en Cuba, ya que la gran mayoría de las empresas estadounidenses no pueden invertir allí debido al bloqueo comercial. El gobierno de Obama concedió licencias a algunas empresas para que establecieran una presencia física. Algunas han tenido éxito. Una subsidiaria de Marriott International abrió el hotel Four Points by Sheraton en La Habana a través de una sociedad con una empresa estatal. En Mayo, Google se convirtió en el primer proveedor extranjero de internet en establecer servidores en el país. Otras empresas han tenido menos éxito, como una empresa de Alabama que abandonó los planes de fabricar tractores en la isla. Funcionarios cubanos se han fijado el objetivo de atraer dos mil millones de dólares al año en inversiones extranjeras. En noviembre, el ministro de Comercio Exterior dijo que Cuba estaba recibiendo menos de la mitad de esa cantidad.

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5. ¿Qué podría aumentar el comercio y la inversión?

Acabar con el bloqueo comercial podría liberar la demanda reprimida de las compañías estadounidenses que quieren hacer negocios en un mercado del que han estado excluidas durante décadas. Aunque después de que Trump cancelara el acuerdo con Cuba no se puede determinar un pronóstico adecuado.

El Instituto Peterson de Economía Internacional calcula que la plena normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba podría dar como resultado que las exportaciones estadounidenses a Cuba fueran de seis mil millones de dólares al año y las exportaciones cubanas a Estados Unidos de siete mil millones de dólares. La inversión extranjera de Estados Unidos podría llegar a dos mil millones de dólares al año. Sin embargo, incluso una normalización plena de las relaciones no haría de Cuba un lugar fácil para invertir. Las leyes que limitan la propiedad extranjera, un complicado sistema de doble moneda (hay pesos y pesos convertibles), y los estrictos controles gubernamentales son algunos de los mayores obstáculos para las compañías internacionales. El Banco Mundial ni siquiera clasifica a la isla en su índice de facilidad de hacer negocios.

6. ¿Podría levantarse el embargo?

Fue codificado en 1996 como parte de la Ley de Libertad y Solidaridad Democrática Cubana. Bajo esa ley, el bloqueo sólo puede ser levantado si el presidente de Estados Unidos certifica al Congreso que ciertas condiciones en Cuba han cambiado, en particular que tiene un gobierno democráticamente elegido. Alternativamente, el Congreso podría enmendar o revocar la ley.

7. ¿Se está moviendo Cuba hacia un gobierno elegido democráticamente?

No. El Partido Comunista ha dicho que no está dispuesto a hacer concesiones con respecto a la forma en que gobierna. Su liderazgo ya ha elegido a su sucesor, el primer vicepresidente Miguel Díaz-Canel, antes de que Raúl Castro anunciara su plan de dejar la presidencia el próximo año. En las elecciones a la Asamblea Nacional, se pide a los electores apoyar o rechazar a un solo candidato, aprobado por el Partido Comunista, para cada escaño.

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8. ¿Podría el Congreso revocar la ley del embargo?

Es improbable, a pesar de que la revocación podría ser popular entre el público estadounidense. Desde 2015, la opinión general estadounidense hacia Cuba,medida por Gallup, ha sido más favorable (51 por ciento en la última medición) que desfavorable (46 por ciento). En una encuesta del diario The New York Times de 2016, la mayoría de los encuestados apoyaron poner fin al embargo. Sin embargo, una vieja guardia de emigrantes cubanos bien organizados y ricos a Estados Unidos que se oponen a la legitimación del gobierno de Cuba tradicionalmente ha tenido influencia sobre la política estadounidense más allá de su número. Eso es porque en 10 de las últimas 11 elecciones presidenciales, el candidato que ganó Florida ganó la presidencia. Antes de que el Congreso pudiera considerar levantar el embargo, el gobierno cubano tendría que pagar miles de millones de dólares a empresas e individuos cuyos hogares y negocios fueron expropiados después de la revolución cubana. Los negociadores cubanos y estadounidenses han avanzado poco en la solución de esas reclamaciones.

9. ¿Cuba se ha vuelto más democrática o menos democrática?

Ninguna de las dos cosas de una manera significativa. Human Rights Watch dice que el gobierno sigue limitando la libertad de expresión, restringiendo el acceso a la información externa y controlando estrictamente los medios de comunicación. El Partido Comunista ha dicho repetidamente que no tiene planes de cambiar el sistema de gobierno o de acabar con la estructura política de un solo partido. La Comisión Cubana para los Derechos Humanos y la Reconciliación Nacional reporta un reciente aumento en el número de detenciones arbitrarias por motivos políticos y en el número de presos políticos: 140 en abril.