Notimex
la Habana.- El gobierno del presidente colombiano Juan Manuel Santos y las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) concluyeron hoy en la capital cubana un nuevo ciclo del diálogo de paz enfocado en el tema de Participación Política.
En un comunicado conjunto, informaron este sábado que pactaron un receso de las mesas de diálogo hasta el 19 de agosto próximo.
Afirmaron que iniciaron la construcción de acuerdos sobre "Derechos y garantías para el ejercicio de la oposición política en general, y en particular para los nuevos movimientos que surjan luego de la firma del Acuerdo Final".
Según el texto, ambas partes "pasaron revista" a los mecanismos democráticos de participación ciudadana y al acceso a medios de comunicación dentro del marco de la participación política.
"El aspecto referente a la seguridad fue abordado ampliamente dentro del ámbito de garantías para el ejercicio de la política, dentro de los enfoques diversos de cada delegación", señaló el documento.
Según analistas, esta retórica del documento refleja la ausencia de algún resultado notable, excepto la mutua disposición de continuar debatiendo los temas, en particular cómo será la inserción de la guerrilla desarmada en la vida política de Colombia.
Los dos equipos negociadores revelaron que escucharon el aporte de quienes describieron como cuatro destacados profesores y académicos colombianos, del Centro de Pensamiento por la Paz de la Universidad Nacional de Colombia y de la Universidad de los Andes.
Sin identificar a esos participantes, dijeron que fueron atendidas sus opiniones "conforme al mecanismo convenido para tal efecto en el Acuerdo General" acordado en La Habana en agosto de 2012.
Tras reiterar su agradecimiento a Cuba y Noruega, países garantes, y Chile y Venezuela, países acompañantes del proceso, anunciaron que en las pláticas a partir del 19 de agosto "continuaremos construyendo acuerdos sobre estos temas".
El grupo armado irregular y el gobierno de Santos iniciaron sus conversaciones de paz el 19 de noviembre de 2012 y, a punto de cumplir nueve meses, hasta ahora sólo han llegado a un acuerdo sobre el controversial tema agrario.
Antes de la emisión del comunicado conjunto número 21, las FARC emitieron por separado un texto en el cual negaron que estén desmoralizadas, una situación que en cambio atribuyen a su enemigo el ejército colombiano.
Acusaron a "oficiales experimentados en guerra de guerrillas" de venderse en los Emiratos Árabes "como mercenarios, donde ganan jugosos salarios en dólares", mientras que en Colombia "arriesgan sus vidas y les pagan con migajas".
El texto, leído por el jefe de los negociadores guerrilleros, Iván Márquez, constituyó una respuesta a una declaración del comandante del Ejército colombiano, Sergio Mantilla, al diario El Tiempo de Bogotá.
"Es poco racional afirmar, como lo hace el general Mantilla, que la guerra se va a acabar por las buenas o por las malas. Esa aseveración emocional carece de fundamento", dijo Márquez a periodistas.
Mantilla dijo el pasado 7 de agosto que la FARC estaban "desmoralizadas por la desigualdad" que existía dentro de sus filas y que iban a "perder la guerra" interna, de casi medio siglo, que estratégicamente tienen ya perdida.
De acuerdo con el comunicado rebelde, los conflictos pueden llegar a su fin a través de la solución política, en una mesa de diálogo, con el compromiso de superar las causas políticas, económicas y sociales que impulsaron al alzamiento armado.
Mundo