Redacción
La Cancillería mexicana citó al Embajador de Estados Unidos en México, Anthony Wayne, luego de las divulgaciones de que el Mandatario habría sido espiado durante la campaña electoral.
"El Gobierno de México rechaza y condena categóricamente cualquier labor de espionaje sobre ciudadanos mexicanos en violación del Derecho Internacional. Este tipo de prácticas es contrario a la Carta de las Naciones Unidas y a la jurisprudencia de la Corte Internacional de Justicia", señaló la Secretaría de Relaciones Exteriores en un comunicado para fijar su posición sobre el caso.
La dependencia añadió que por medio de una nota diplomática solicitó al Gobierno de Estados Unidos una investigación exhaustiva.
Según documentos divulgados por la televisión brasileña, Estados Unidos espió correos electrónicos y conversaciones telefónicas de Peña Nieto y de la presidenta de Brasil Dilma Rousseff,
Documentos filtrados por el ex contratista estadounidense Edward Snowden y revelados el domingo por la noche por la Red Globo sugieren que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés) interceptó mensajes de Peña Nieto durante la campaña electoral del 2012 con los nombres de algunos de sus futuros miembros del gabinete.
"El Equipo de Liderazgo de México de la NSA realizó un esfuerzo de desarrollo de blanco de dos semanas contra uno de los principales candidatos presidenciales de México, Enrique Peña Nieto", dice uno de los documentos mostrados.
También se espiaron llamadas telefónicas y mensajes de Rousseff y sus principales asesores, según un documento de la NSA entregado por el fugitivo Snowden al periodista Glenn Greenwald, del diario The Guardian de Londres y colaborador de la brasileña Rede Globo.
El Gobierno brasileño dijo que exigiría explicaciones a Estados Unidos y podría llevar el caso ante Naciones Unidas.
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