NUEVA YORK. El secretario general de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, urgió a los líderes en Irak a que eviten las represalias luego de los informes que indican que terroristas ejecutaron de manera sumaria a más de mil 700 soldados.
En un comunicado, Ban llamó a los líderes políticos, militares, religiosos y comunitarios a garantizar que sus seguidores eviten actos de represalia, y a que se abstengan de usar retórica sectaria que pudiera exacerbar aún más el conflicto y se extienda en la región.
Reiteró su condena al repunte reciente de la violencia en territorio iraquí llevada a cabo por grupos como el Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), y subrayó la urgencia de que todos aquellos responsables de crímenes sean llevados ante la justicia.
Asimismo, dio la bienvenida a la aclaración del líder religioso Sayed Ali Al-Sistani, quien llamó a la unidad del pueblo de Irak y no a que los ciudadanos del país tomaran las armas contra el terrorismo, debido a que éste representa una "influyente voz de sabiduría y razón".
"El secretario general urge a los líderes iraquíes a unirse en apoyo de un plan nacional de seguridad, así como de medidas políticas y sociales, dirigidas a resolver, con base en la Constitución, la sustancial amenaza al país", destacó.
Pidió también a la comunidad internacional que muestra su solidaridad con Irak para confrontar este serio reto a su seguridad, y recordó que la lucha contra el terrorismo debe basarse en el respeto al derecho internacional humanitario y a los derechos humanos.
El titular de la ONU resaltó además la disposición de este organismo para asistir al gobierno y al pueblo de Irak en su lucha para superar la crisis por la que atraviesa.