Monterrey

Las Falacias de Trump, Kia y el Gobierno de Nuevo León

OPINIÓN. Los gobiernos deben aceptar y prever que la robotización y el comercio vía internet reducirán las posiciones de trabajo tradicionales; por lo que se deben promover las inversiones en y hacia México y los gobiernos locales.

Hoy, Estados Unidos (EU) mantiene un déficit comercial de 67 mil millones de dólares en su balanza comercial con México en el sector automotriz, que incluye la producción de automóviles y sus partes, según la Asociación Nacional de Fabricantes de autos de
Norteamérica
.

Casi el 40 por ciento de las partes utilizadas y sus insumos de producción para el ensamble proviene de EU y el 4 por ciento de China, según estimaciones.

Así que algunas áreas de ensambles y piezas están regresando
al propio EU, pero no así necesariamente los empleos que alguna vez
emigraron para encontrar mejores precios y condiciones de los productores de la industria automovilística, como es el caso Corea-México, donde el mercado final es EU. Todo esto en línea con la visión de Donald Trump.

De hecho, los empleos no regresan, ni regresarán a EU, simplemente porque las nuevas generaciones de robots pueden hacer el trabajo más rápido, más barato y con mayor precisión que los humanos.

Incluso en México, con sus proclamados menores costos laborales, las
máquinas sustituyen al hombre en las nuevas factorías, un ejemplo claro está en Kia, en Pesquería, Nuevo León, cerca de la capital industrial de México: Monterrey.

Como antecedente, comento, que existe una vieja reclamación sobre los precios del acero internacional en el que México alega: China utiliza prácticas ilegales -dumping- para exportar este insumo, dañando industrias acereras mexicanas; lo cual puede ser cierto, -no hay duda-, sin embargo diversos organismos investigadores internacionales, - según difundió CNN en español-, encontraron que en el proceso de elaboración del acero, la mano de obra se ha reducido hasta en un 70 por ciento, con los nuevos formatos de producción, y predicen que lo mismo sucede en otras importantes áreas de producción, por lo que
es una falacia –y quimera económica- pensar que Detroit y otras áreas
manufactureras volverán al antiguo esplendor.

Así las cosas, en la nueva fábrica de Kia en Nuevo León, los robots dominan grandes espacios de producción, donde carrocerías y chasises de los compactos Forte toman forma, a pesar de los alegatos políticos que le rodean.
 
"En un área de soldadura en el centro de la línea de montaje, más de 300 máquinas automatizadas trabajan, en concierto con otros, para unir las puertas al sedán, ensamblar sus techos y las defensas. En las líneas automatizadas, los trabajadores rara vez interactúan con los robots.

Incluso, por ejemplo, cuando las personas intervienen manualmente para instalar y soldar el capacete del sedán, no es más que guiando una máquina; no hay esfuerzo de carga. Es por lo que no se cansa la espalda", declaró Víctor Alemán, portavoz de Kia México, al Seattle Times, mientras observaba como un soldador guiaba una enorme
máquina hacia la carrocería de un Forte, según relata a este diario.

Además destaca que prácticamente la totalidad de los sedanes y hatch backs Forte vendidos en EU serán producido en esta planta en México.
"Estamos muy contentos porque estos trabajadores no se quejan", agregó Alemán -haciendo alusión a los robots-, al diario estadounidense de la región, sede de la armadora Boeing, una de las empresas más grandes del mundo que mantienen activos a los viajeros de todo el mundo.

Aquí amigo lector, vale la pena considerar que un trabajador automotriz en la Kia mexicana gana 3.75 dólares por hora, bajo la actual conversión monetaria, según la propia compañía; mientras que su similar automotriz típico en EU percibe alrededor de 40 dólares por
hora, de acuerdo con la oficina de estadísticas laborales de este país.

Como conclusión, estimado lector, le comento que en una semana más se reunirá el G20 en China, seguramente las tendencias de las economías se globalizarán más y los países visitantes externarán sus opiniones en formatos políticamente correctos.

Pero los gobiernos deben aceptar y prever que la robotización y el comercio vía internet reducirán las posiciones de trabajo tradicionales; por lo que se deben promover las inversiones en y hacia México y los gobiernos locales, como el de Nuevo León, deben dejar de utilizar sus rabietas histriónicas como herramientas políticas porque todo esto
afecta a México.

O ¿qué opina usted?

* El autor es analista político en Texas, y experto en temas
de la frontera México-EstadosUnidos.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.

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