El mercado de arrendamiento de naves y parques industriales en Monterrey, el segundo más importante después del Valle de México, presentó en los primeros nueve meses del año su peor desempeño en al menos cinco años.
Para los especialistas, esto se debe principalmente a la incertidumbre generada por las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), a la hostilidad de la administración Trump frente a la industria mexicana y a que los desarrolladores regiomontanos no estuvieron dispuestos a cambiar sus contratos a pesos, a diferencia de lo que sí sucedió en la Ciudad de México y Guadalajara.
"El mercado de Monterrey no se desempeñó como debería, donde en promedio se absorben alrededor de 557 mil metros cuadrados, y a septiembre no llega ni a los 186 mil metros cuadrados. Yo creo que Monterrey estaría cerrando en alrededor de 371 mil metros, lo cual no es un buen año", dijo Carlos García, vicepresidente de logística e industrial de Coldwell Banker Commercial.
Al cierre de 2017, según estimaciones de la firma de corretaje, el mercado industrial de Monterrey presentará una caída en el arrendamiento de alrededor de 34 por ciento respecto al promedio de los cinco años anteriores.
Derivado del constante crecimiento en servicios de logística y a que los desarrolladores decidieron dejar de lado la cotización de espacios en dólares, el desempeño en el Valle de México se mantiene estable con 915 mil metros cuadrados desplazados al tercer cuarto de 2017, cifra similar a la observada un año antes.
"Guadalajara ha tenido un año promedio y la Ciudad de México tiene un desempeño por encima de su estándar, el mercado del valle de México está muy activo. En Querétaro, cada vez vemos más la introducción de la industria automotriz, donde vienen proveedores de ese nicho y están tratando de localizarse en Querétaro por su cercanía a las grandes armadoras", destacó García.
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