Los precios del crudo mantienen una tendencia mixta en ambos lados del Atlántico, con el crudo WTI repuntando sobre los 51 dólares, sumando su segunda jornada de ganancias.
El precio del barril de crudo WTI para entrega en abril ganó 1.01 dólares, es decir, 2 por ciento, para terminar en 51.53 dólares el barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York.
A contracorriente, el convenio del Brent para entrega en el mismo mes, recortó las pérdidas de las operaciones intradía de hasta el 3 por ciento y se mantuvo sobre el nivel de soporte de 60 dólares por barril.
En las cotizaciones en la bolsa ICE Futures Europa con sede en Londres, el Brent bajó 47 centavos por barril, o 0.8 por ciento, a 60.55 dólares.
Los futuros reaccionaban ante la preocupación de que el aumento de los suministros de los Estados Unidos a su mayor nivel en 14 años se sume a un exceso de oferta global.
El petróleo se enfrentó a una presión adicional por un dólar más fuerte, ya que la divisa estadounidense alcanzó su máximo desde septiembre de 2003 frente a una canasta de monedas, encareciendo las materias primas tasadas en el billete verde.
Más temprano en la sesión, el mercado recibió algo de apoyo por parte del ministro del Petróleo de Arabia Saudita, Ali al-Naimi, quien afirmó que espera que el suministro y la demanda se equilibren pronto, sumándose a las señales que indican que el mayor exportador de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) confía en que la demanda está creciendo.
El discurso tuvo lugar tras conocerse que Arabia Saudita subió el martes los precios oficiales de venta (OSP, por su sigla en inglés) para sus entregas de petróleo a clientes en Asia y en Estados Unidos.
La gubernamental Administración de Información de Energía (EIA, por sus siglas en inglés) informó que los inventarios de crudo en Estados Unidos subieron 10.3 millones de barriles en la semana al 27 de febrero, más del doble de lo esperado por los analistas y su octava subida semanal seguida. Las existencias de crudo están en su récord máximo.
Las reservas en el punto de entrega de Cushing, Oklahoma, se alzaron en 536.000 barriles, menos de lo esperado, pero un gran incremento aún. Los inventarios de gasolina se mantuvieron apenas sin cambios, mientras los destilados bajaron 1.4 millones de barriles.
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