Las principales plazas accionarias europeas concluyeron la última jornada de la semana con pérdidas, arrastradas por unos datos económicos débiles de Europa que se sumaron a otros similares de China.
Los datos aumentaron las preocupaciones sobre una desaceleración económica global, además de elevar los temores entre los inversores de un impacto más amplio de la disputa comercial entre China y Estados Unidos aún no resuelta.
El índice STOXX 600 de la zona euro bajó 0.72 por ciento y en el trimestre acumula una pérdida de un 9.5 por ciento. El índice está en camino de cerrar su peor trimestre desde 2011.
En tanto que el índice FTSE-100 de Londres cayó 0.47 por ciento, a 6 mil 845.17 unidades; el DAX-40 de Frankfurt terminó en baja de 0.54 por ciento, en las 10 mil 865.77 unidades; el CAC-40 de París perdió 0.88 por ciento, para quedar en 4 mil 853.70 unidades.
Por su parte, el índice Ibex-35 de Madrid restó un 0.45 por ciento, para quedar en 8 mil 886.10 unidades, mientras que el Mibtel de Milán cedió 0.72 por ciento, a 18 mil 910.79 unidades.
Los inversores se alejaron de las acciones tras cifras que mostraron que las ventas minoristas de China en noviembre crecieron al ritmo más débil desde 2003 y que la producción industrial tuvo su menor alza en casi tres años porque la demanda interna se moderó aún más.
El sector de fabricantes de automóviles y proveedores de partes cayó 1.44 por ciento y fue el mayor perdedor de la jornada. Una caída de las ventas de autos en Europa el mes pasado profundizó la inquietud por la desaceleración de la demanda.
En otro rubro, el sector de lujo también estuvo en la mirada de los inversores después de que LVMH, propietario de Hennessy, Moet y Louis Vuitton, anunció planes para comprar el grupo de hoteles boutique Belmond , un negocio valorado en 3.200 millones de dólares. Las acciones de LVMH cayeron 1.52 por ciento.
Una cumbre en Bruselas donde los líderes de la Unión Europea le dijeron a la primera ministra británica Theresa May que no renegociarían el acuerdo Brexit hizo poco para levantar el ánimo.
La libra esterlina se debilitaba un 0.75 por ciento y el índice líder de las acciones líderes británicas perdió un 0.65 por ciento.
En Europa, el jueves el Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE), en su última reunión del año, cumplió con el guion previsto y, tras mantener sin cambios sus tasas de interés de referencia, anunció formalmente el final del programa de compra de activos en los mercados secundarios.
No obstante, y tras revisar ligeramente a la baja sus expectativas de crecimiento para la economía de la eurozona la institución, el presidente del Banco Central, Mario Draghi, dejó clara su intención de mantener sus políticas monetarias acomodaticias por el tiempo que considere necesario.
El organismo ahora espera que el PIB de la eurozona crezca el 1.9 por ciento en 2018, algo por debajo del dos por ciento de su anterior estimación. En lo que hace referencia a la inflación, espera que en 2018 se sitúe en el 1.8 por ciento, una décima por encima de su estimación anterior.
Otro sondeo mostró que la actividad empresarial en Francia se contrajo inesperadamente este mes y a su ritmo más veloz en más de cuatro años ante las violentas protestas antigubernamentales.
En tanto, la expansión del sector privado de Alemania se desaceleró a un mínimo de cuatro años, lo que sugiere que la economía más grande de Europa podría registrar un cuarto trimestre débil.
En el mercado de divisas, el euro se depreció 0.5 por ciento ( 1.1298 unidades por dólar) tras la divulgación de índices de gerentes de compras débiles.
Con información de Reuters, Notimex y Bloomberg.