CIUDAD DE MÉXICO.-El jueves, prevaleció un clima desfavorable para las monedas emergentes, lo que también afecto negativamente al peso. Este comportamiento obedeció a la publicación de cifras económicas débiles en China, debido a sus repercusiones negativas sobre los precios de las materias primas y, por lo tanto, para la generación de divisas.
De acuerdo a cifras publicadas por el Banco de México, el dólar cerró el jueves en 13.6225 unidades a la venta, lo que implicó para el peso un retroceso de 4.80 centavos equivalentes 0.35 por ciento.
En el mercado de menudeo o de ventanilla, el dólar se vendió en promedio alrededor de 13.85 pesos.
Las monedas emergentes, principalmente de aquellas naciones más dependientes de sus ingresos por exportación de materias primas, estuvieron a presionadas a la baja por el reporte de una menor actividad en China, uno de los principales consumidores de este tipo de productos.
La depreciación de la moneda de México fue inferior al 1.13 por ciento observada para la perteneciente a naciones como Brasil, país más ligado a la evolución de la economía de China.
En México, debe contribuir a generar una mayor certidumbre el anuncio de que los ingresos petroleros están cubiertos para el 2015, lo que elimina presiones derivadas de la caída en los precios del petróleo.
En tanto que las divisas de naciones desarrolladas mostraron un mejor desempeño, situación que se reflejó en una caída de 0.16 por ciento del dólar en el mercado internacional.
La debilidad del billete verde no se pudo evitar, incluso por declaraciones de un importante integrante de la Fed en torno al posible tiempo en que las tasas de interés puedan empezar a subir.
De acuerdo, al presidente de la Reserva Federal de Nueva York, William Dudley, son razonables las expectativas del mercado en torno a un aumento de las tasas de interés a mediados del 2015. Esta perspectiva puede hacer que la fortaleza del dólar haya llegado para quedarse.