CIUDAD DE MÉXICO.- La onza troy del oro se replegó desde su máximo de 17 semanas, como resultado de su peor caída de casi un mes, después de que un inesperado repunte de las ventas de casas nuevas en Estados Unidos catapultó al dólar y restó brillo a la cotización del metal precioso como una alternativa de inversión.
Adicionalmente, el reporte del sector inmobiliario estadounidense aumentó las expectativas de que la Reserva Federal continuará con la retirada ordenada de estímulos, un contexto que resta interés adicional al metal como una cobertura de inversión.
Así, en el Commodity Exchange (Comex), el convenio más activo del oro con liquidación en abril descendió 1.1 por ciento –su peor caída desde el 30 de enero-- para cerrar en mil 328 dólares la onza, después de escalar en los primeros minutos hasta un máximo de mil 345.60 dólares, su mayor cotización desde el 30 de noviembre.
Es importante señalar que el metal dorado acumula una ganancia de 7 por ciento en lo que va del mes, y un rendimiento de 10 por ciento en el año, después del desplome de 28 por ciento en 2013, beneficiado por las expectativas de que la Fed podría moderar el ritmo de su retirada de estímulos.
Sin embargo, la publicación esta mañana, de un inesperado repunte de las ventas de casas nuevas en Estados Unidos, aumentó las apuestas de que la presidenta de la Fed, Janet Yellen, confirmará este jueves que continuarán con la retirada ordena de sus estímulos, una estrategia que juega en contra de los metales preciosos.
Y es que el oro repuntó un 70 por ciento desde diciembre de 2008 hasta junio de 2011, escalando a un récord de mil 923 dólares en septiembre de ese año, después de que la Fed inyectó más dos billones de dólares al sistema financiero para estimular el crecimiento económico.
Se espera que la Fed, que recortó en 10 mil millones de dólares sus compras mensuales de bonos, continúe con una reducción similar en cada una de sus reuniones de este año, para concluir con su programa al final del 2014.
Por lo pronto, esa percepción disparó al dólar frente a las principales divisas, restando brillo a los metales preciosos como una alternativa de inversión.
En el corto plazo, los analistas aún auguran que el oro se estabilizará sobre la marca psicológica de mil 300 dólares, pero desestiman que por ahora, pueda escalar hasta los mil 400 dólares.
Desde el punto de vista técnico, el oro aún enfrenta una resistencia clave en la marca de los mil 353.50 dólares, misma que fue su cotización más alta desde el 25 de octubre de 2013.