El precio del petróleo mexicano se recuperó 1.4 por ciento en las operaciones del jueves, lo que interrumpió cuatro sesiones a la baja en donde retrocedió 3.17 dólares por barril y tocó un mínimo de más de dos semanas.
La también llamada mezcla mexicana de exportación alcanzó un precio de 44.30 dólares por barril, lo que implicó un incremento de 63 centavos en comparación con su nivel previo de 43.67 dólares. El movimiento superó el observado por los principales crudos referenciales.
En el marco de una fuerte reducción de los inventarios de crudo estadounidense, el precio del Brent llegó a los 50.63 dólares por barril, tras una mínima reducción de 0.02 por ciento; en sentido contrario, el estadounidense WTI subió 0.08 por ciento y cerró las negociaciones en un precio promedio de 48.36 dólares.
Los analistas y operadores del mercado de energéticos esperaban que el dato de inventarios de crudo de los Estados Unidos impulsara los precios, al estimarse una reducción tanto en petróleo como en las gasolinas.
De hecho, la Administradora de Información de Energía (EIA, por sus siglas en inglés), informó que los inventarios de crudo cayeron 6.4 millones de barriles, superando las expectativas que fluctuaban entre los 2.5 y 4.4 millones de barriles. En tanto que, los inventarios de gasolina también bajaron como resultado de un aumento estacional de la demanda de verano.
Esta fue la octava semana consecutiva en que se reducen los inventarios de crudo estadounidense, pero esto fue insuficiente para contrarrestar las expectativas de una mayor producción, tanto de algunos países de la OPEP, como de Estados Unidos.
En un informe publicado el miércoles, la OPEP destaco un aumento en sus niveles de extracción impulsados por Libia y Nigeria. Sin embargo, este día el secretario general Mohammad Barkindo informo que es muy pronto para imponerles límites a su producción, ya que este aumento les permitirá resolver algunas cuestiones internas.
Si bien en la resolución de la OPEP de la semana anterior se informó que aumentaba la vigencia del programa de recortes, trascendió que en las discusiones se contempló un mayor recorte a los niveles de extracción, que podría fluctuar en un ajuste del 1.0 al 1.5 por ciento.
En el tema de los Estados Unidos, la producción se ha incrementado en las últimas semana a máximos desde agosto de 2015 y se estima que luego de la salida de dicho país del Acuerdo de París, se impulsará la demanda y producción de combustibles fósiles.