CIUDAD DE MÉXICO.- Los mercados accionarios de México y Nueva York hicieron caso omiso ante la versión definitiva del PIB al primer trimestre del año en Estados Unidos, un número mucho más bajo que lo previsto por los economistas.
Baste decir que el PIB del cuarto trimestre del 2013 fue de 2.6 por ciento, pero después de sucesivos recortes, al primer trimestre se calculó en menos 2.9 por ciento.
Pero los inversionistas e intermediarios en la práctica ignoraron los datos débiles publicados por la mañana en Estados Unidos, y en lugar de ello, concentraron su mirada en las expectativas económicas para el segundo trimestre del año, y para el resto del año. Por supuesto, una mejora normal en los indicadores del trimestre actual pudiera traducirse en un repunte porcentual bastante elevado para la cifra del PIB del segundo trimestre, ya que comparará contra un primer trimestre por demás negativo.
En México, el índice de la Bolsa concluyó con un desliz marginal de 0.07 por ciento en 42 mil 854.19 unidades. El volumen fue de 244.9 millones de acciones y 133 mil 703 operaciones.
El dato desfavorable de los pedidos de bienes duraderos publicado por la mañana, en realidad no fue tan malo si se considera la cifra sin el componente volátil del sector transportes, por lo que su efecto en los mercados no se notó.
En la NYSE, el índice Dow Jones aumentó 0.29 por ciento a 16 mil 867.51 puntos, mientras que el índice S&P 500 subió 0.49 por ciento a mil 959.53 unidades. En la bolsa Nasdaq la ganancia fue de 0.68 por ciento a 4 mil 379.76 puntos.
Así, los mercados se concentraron en las expectativas, más que en los hechos históricos, y los especialistas prevén un mejor desempeño para las estadísticas del segundo trimestre y para el resto del año, en especial a la luz de números recientes que apuntan a una recuperación económica: por ejemplo, la actividad de manufacturas en el área de Filadelfia, los datos de ventas de casas nuevas y usadas, y en el índice de la confianza de los consumidores.
En consecuencia, la buena noticia del día fue que las Bolsas no cayeron por motivo de las malas estadísticas, por el contrario, incluso se reportaron ganancias.