CIUDAD DE MÉXICO.- En la primera sesión del año, renovados temores por el crecimiento económico en el mundo arrastraron a la baja al peso, siguiendo a la caída en las principales monedas en el mundo.
El dólar de ventanilla o de menudeo opera alrededor de 17.65 unidades a la venta, marginalmente por debajo de su máximo histórico de 17.69 alcanzado el pasado 30 de diciembre. En operaciones de intradía llegó a tocar 17.68 pesos.
El dólar interbancario cierra el lunes en 17.331 unidades a la venta, de acuerdo con cifras publicadas por el Banco de México. En el día, el peso retrocedió 11.90 centavos, semejante a 0.69 por ciento.
El epicentro de la sacudida en el mercado cambiario se ubicó en China debido a un reporte de cifras negativas del sector manufacturero, las cuales señalan una persistente debilidad económica en el gigante asiático.
El indicador de la actividad manufacturera en China bajó a 48.2 puntos en el pasado diciembre, con lo que acumuló un ciclo de 10 meses en fase de contracción.
La caída del yuan a mínimos de cuatro años y medio provocó un efecto domino sobre prácticamente todas las monedas y divisas en el mundo.
Las bajas estuvieron encabezadas por el dólar de neozelandés, el peso argentino, el real brasileño con variaciones de (-1.98 %), 1.94 %) y 1.76 %).
En el Olimpo de las divas el euro y la libra esterlina retrocedieron 0.31 y 0.25 por ciento, respectivamente.
El dólar inicio el año con el pie derecho, al ser demandado como divisa de refugio a pesar de datos económicos débiles reportados en los Estados Unidos.
El billete verde avanzó 0.17 por ciento con respecto a una canasta de seis divisas.
La única moneda de refugio importante que subió fue el yen, al apreciarse 0.98 por ciento.
El índice que mide la actividad manufacturera en la segunda economía del mundo se reportó en 48.2 puntos, lo que acumuló un ciclo de baja de 10 meses por debajo de la barreara que señala un fase de desaceleración.
En el mercado petrolero, lo precios mostraron debilidad, lo que afectó también negativamente al peso. El West Texas Intermediate bajó 1.08 por ciento a 36.64 dólares por barril, mientras que el Brent disminuyó 0.48 por ciento a 37.10 dólares.