Los precios del cobre sumaron su segunda caída consecutiva, debido a que la posibilidad de un incremento de los suministros opacaron señales alentadoras de una mejoría en la economía global, mientras que el zinc retrocedió después de acercarse a máximos de tres años por expectativas de menores existencias.
No obstante, según operadores se espera para esta semana que el reporte del PIB de Estados Unidos y su lectura sobre el empleo, además de los datos sobre la salud del sector fabril de China, muestren nuevas señales de que se está llevando a cabo un repunte en la actividad global.
En este contexto, el contrato para el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres cerró con un declive de 0.56 por ciento a 7 mil 080 dólares la tonelada, frente a los 7 mil 120 dólares la tonelada del cierre previo.
El cobre cerró el lunes a la baja, luego que el viernes pasado se alcanzara un acuerdo entre Freeport-McMoRan Inc y el gobierno de Indonesia, que permitirá a la minera reanudar sus exportaciones de concentrado del mineral.
Se prevé que Freeport exporte 756.000 toneladas de concentrado de cobre en el segundo semestre de este año, y el suministro adicional llegará en un momento en que se espera que el mercado del cobre se encuentre cerca de pasar al superávit.
Datos divulgados previamente este mes mostraron que el sector de manufacturas del mayor consumidor de metales, China, se expandió a su ritmo más veloz en 18 meses en julio, mientras que la economía estadounidense ha ganado ritmo y el panorama de su mercado laboral es cada vez más positivo.
En el mercado Comex de Nueva York, el metal rojo se cotizó en tanto que el precio del 3,2277 dólares la libra, valor que se compara con los 3,2350 del lunes y los 3,2583 del viernes.
Por su parte, el precio del zinc alcanzó un máximo de sesión de 2 mil 416 dólares la tonelada, su mayor nivel desde agosto del 2011 por segundo día consecutivo, impulsado por la incertidumbre sobre el suministro, aunque cerró con un descenso de casi un 2 por ciento a 2 mil 366 dólares.
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