CIUDAD DE MÉXICO.- La bolsa mexicana comenzó la semana con una reducción apreciable de 0.58 por ciento, con lo que el índice se ubicó en 40 mil 654.07 unidades. La caída se dio a pesar de algunos números favorables de la economía que se dieron durante el jueves y viernes en Estados Unidos, y a pesar de una racha alcista en las bolsas de Nueva York.
Cambiaron de manos 192.3 millones de acciones por medio de 94 mil 497 operaciones, una actividad más bien moderada, debido a que algunos participantes prosiguieron de vacaciones. El balance de avances y declinaciones estuvo acorde con los saldos negativos del índice: de 101 emisoras negociadas, subieron 40, perdieron 54 y las restantes 7 no variaron.
Desde luego, afectó un tropezón de 1.47 por ciento en los títulos de América Móvil, y pérdidas de Alfa, GMéxico y Peñoles de 0.82, 2.09 y 1.67 por ciento, en el mismo orden.
Datos de la semana pasada, superiores a lo previsto, de producción industrial, capacidad utilizada de las fábricas y actividad de manufacturas en la región de Filadelfia marcaron la pauta para avances en Wall Street, y configuraban un favorable entorno para la plaza mexicana.
Sin embargo, las noticias locales fueron un factor de desánimo para el mercado nacional, ya que los inversionistas se concentraron en la debilidad del mercado interno.
En la NYSE, el promedio Dow Jones aumentó 0.25 por ciento a 16 mil 449.25 unidades, mientras que el índice S&P500 subió 0.38 por ciento a mil 871.89 puntos, en este caso a 1.02 por ciento de alcanzar a su punto histórico de cierre más alto.
En la bolsa Nasdaq la ganancia fue de 0.64 por ciento a 4 mil 121.55 unidades.
Los inversionistas se movieron más por reportes trimestrales que por datos de la economía, en lo que al parecer será la tónica para el resto de la semana.