En una decisión descontada por los mercados, el Banco Central Europeo (BCE) mantuvó su tasa de interés referencial en un mínimo nivel histórico de un 0.15 por ciento, vigente desde el 5 de junio, absteniéndose de actuar mientras espera que las medidas de estímulo adoptadas el mes pasado surtan efecto.
A principio de junio, el comité de política europea recortó las tasas de interés, llevando su tasa de depósitos a territorio negativo y lanzó una nueva ronda de préstamos a largo plazo para impulsar el crédito, además de señalar que haría más si fuera necesario.
En la reunión de hoy, la entidad financiera dejó sin cambios la tasa de depósitos a un día en -0.10 por ciento, que significa en la práctica que se cobra a los bancos por dejar sus fondos en el banco central, y mantuvo su instrumento marginal de préstamos -o tasa crédito de emergencia- en un 0.40 por ciento.
Los mercados centrarán su atención en la conferencia de prensa que ofreceráel presidente del BCE, Mario Draghi, a las 1230 GMT, en la que se espera que entregue una explicación más detallada sobre la decisión de la entidad.
En el mercado de divisas, el euro recorta las pérdidas de la sesión anterior al caer un 0.04 por ciento frente al dólar, cotizándose en 1,3647 euros por dólar. El miércoles la divisa europea cerró en 1,3653 dólares.
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