FRÁNKFURT.- En su último esfuerzo por reavivar la inflación en la zona euro, el Banco Central Europeo (BCE) inició este miércoles la compra de deuda corporativa, adquiriendo bonos de empresas no financieras radicadas en la zona euro, entre ellas las aseguradoras, que cuenten con una calificación de inversión cuyo grado sea BBB- o superior y cuyo vencimiento sea de entre un mínimo de seis meses y un máximo de 30 años.
Al añadir deuda con grado de inversión a sus compras de activos por mil 740 billones de euros (1.97 millones de dólares), el BCE espera reducir aún más los costos de endeudamiento, dando a las empresas incentivos para invertir, alimentando un crecimiento más rápido en el bloque, que sigue bregando para superar las últimas etapas de su crisis de deuda.
Al ampliar su abanico de adquisiciones, la institución monetaria pretende evitar que las compañías europeas acudan a la banca tradicional a refinanciarse. De esta forma, les facilita liquidez para sanear sus balances y como consecuencia las anima a apostar por la inversión.
El BCE excluye de esta nueva compra a las empresas financieras, es decir, no adquirirá bonos emitidos por las entidades bancarias.
El banco no ha revelado a cuánto ascenderán sus compras de bonos corporativos aunque los analistas estiman que sus adquisiciones mensuales se situarán entre los cinco mil y 10 mil millones de euros.
A este respecto, la entidad monetaria simplemente ha confirmado que estas adquisiciones se realizarán a través de los bancos centrales nacionales y que se englobarán dentro del programa de compra de activos conocido como QE (Quantitative Easing, un instrumento de la política monetaria expansiva).
La traducción de QE en español es "flexibilización cuantitativa" o "expansión monetaria cuantitativa" y se definen como una ampliación de la masa monetaria por parte del EZB para estimular la economía.
Este último es un instrumento que el BCE tiene activo desde marzo del pasado año y que contempla la compra de deuda pública y privada por valor de 80 mil millones de euros al mes.
A partir del próximo 18 de julio, según confirmó el presidente del BCE, Mario Draghi, en su última comparecencia pública, la entidad hará pública la lista de bonos adquiridos semanalmente aunque no facilitará información sobre las cantidades en cartera de las que dispone.