Mercados

Petroprecios tienen su peor caída semanal desde octubre

Los precios cayeron 1 por ciento en la jornada de este viernes y sufrieron su mayor baja semanal desde octubre, debido a que un repunte de la producción en Estados Unidos contrarrestó declives de los inventarios de crudo.

Los precios del petróleo profundizaron las pérdidas al cierre de las operaciones de este viernes,  sumando así su mayor baja semanal desde octubre en medio de las predicciones de un fuerte aumento en la producción de crudo de Estados Unidos este año.

Los futuros del crudo Brent para entrega en marzo cayeron 1.0 por ciento, a 68.61 dólares por barril en la bolsa ICE Futures Europe, con sede en Londres.

En tanto que los futuros del petróleo WTI de referencia en Estados Unidos terminaron la sesión en 63.37 dólares por barril, lo que representó una baja 0.90 por ciento respecto al cierre previo.

Ambos contratos, que registraron en la semana niveles máximos desde diciembre de 2014, mostraron un desempeño negativo por arriba del uno por ciento. 

El contrato del Brent perdió 1.8 por ciento, mientras que el estadounidense WTI retrocedió 1.44 por ciento.

La Agencia Internacional de Energía (AIE) estimó un crecimiento "explosivo" en el suministro de petróleo de Estados Unidos este año después de un período "excepcionalmente ajustado" para los mercados de crudo a fines de 2017.

La OPEP y la Administración de Información Energética también impulsaron recientemente sus perspectivas para la producción estadounidense.


La escalada del petróleo ha fallado después de dos aumentos anuales en la especulación de que el aumento en los precios puede haber sido exagerado.

Los bancos, incluido Citigroup, predicen que el acuerdo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados comenzará a cerrarse a mediados de año cuando alcancen su objetivo de reducir un excedente global.

Aún así, los ministros de los Emiratos Árabes Unidos, Irak y Kuwait han insistido en que no hay necesidad de cambiar el rumbo.

Los analistas también apuntaron a una esperada desaceleración de la demanda a fines del invierno en el hemisferio norte y a posiciones excesivamente largas en mercados petroleros financieros como un probable freno a cualquier impulso alcista en los precios.

Sin embargo, en general los precios permanecen bien respaldados y la mayoría de los analistas no prevén declives fuertes.

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