Las acciones de las firmas cementera Holcim Ltd. y Lafarge SA se hundían este martes casi 2 por ciento, en medio de los desacuerdos sobre el liderazgo y las condiciones financieras de su propuesta de fusión que ponen en riesgo los planes para crear la cementera más grande del mundo.
En las cotizaciones en el índice SSMI de la bolsa de suiza, los títulos de Holcim caían un 1.95 por ciento, a 73.00 francos a 73.00 francos suizos, mientras que las de la firma francesa Lafarge retroceden 1.83 por ciento, para cotizarse en 59.95 euros por papel que cotiza en el índice CAC-40 de la bolsa parisina.
Ayer, la firma suiza Holcim solicitó frenar su fusión con Lafarge y presionó a la compañía francesa para renegociar los términos del acuerdo, lo que pone en riesgo el plan para crear la cementera más grande del mundo.
La parte central del desacuerdo entre los dos grupo fue el precio. Esto siempre se vio mejor para los accionistas de Lafarge que para los de Holcim. La diferencia del precio de las acciones desde que se anunció el acuerdo en abril pasado solo significó que la disparidad aumentó.
Mientras Lafarge parece estar listo para ajustar un poco la relación acción por acción, su junta de consejo no consentirá un precio que hizo clara la realidad de la situación, que la empresa suiza tomaba el control.
Una vez que los dos grupos no se pusieron de acuerdo en el precio surgieron los problemas. Holcim ya no está contento con la idea de que Lafarge esté al mando.
Y aunque Lafarge se queja de los "conservadores" inversionistas suizos que no logran centrarse en los beneficios de largo plazo del acuerdo, Holcim lamenta la incapacidad de su rival para ser realista en los términos financieros.