CIUDAD DE MÉXICO. El Bosque del Ajusco requiere de mil 200 millones de pesos de recursos federales para conservar su vocación forestal y proveedora de agua para la metrópoli, aseguró la jefa delegacional en Tlalpan, Maricela Contreras Julián.
Explicó que con ello se podría pagar a los dueños de las tierras y que no las transformen.
En entrevista con El Financiero, detalló actualmente los recursos son insuficientes para conservar el área boscosa.
Contreras hizo un llamado a los diputados federales para que puedan asignar estos recursos, como un bono verde, a la delegación para el cuidado del bosque.
"Es parecido a un bono que se da en Veracruz, a la parte alta, y en Tamaulipas, para la siembra de la caña de azúcar", dijo.
La delegación destina actualmente un presupuesto de ocho millones de pesos para 10 núcleos agrarios, a los que se les financian proyectos de conservación.
El 76 por ciento del territorio de Tlalpan es suelo de conservación, pero corre el riesgo de que los propietarios, ejidales o comunales, decidan vender sus terrenos y la mancha urbana crezca.
La zona boscosa de Tlalpan padece 197 asentamientos irregulares, informó Contreras.
Además, aunque Tlalpan cuenta con dos Áreas Naturales Protegidas, el Parque Nacional Cumbres del Ajusco y el Parque Ecológico de la Ciudad de México, ninguno cuenta con un Plan de Manejo con el que se definan las labores de conservación.
"Habría que discutir el tema de la veda forestal; porque cuando hay veda, lo que se tiene son talas clandestinas y eso afecta a toda la Sierra del Chichinautzin".