Creativos Prácticos es la primera franquicia mexicana de administración de redes sociales para empresas, cuyos profesionales son conocidos como community managers.
Inició en 2011 en Mérida, Yucatán, cuando Fernando Rojas y Ricardo Sánchez se percataron que las redes sociales era aún un territorio desconocido, sobre todo para pequeñas y medianas empresas (Pymes).
En noviembre del 2014 vendieron su primera franquicia en España. "Vimos un nicho de mercado explorable, pues las redes sociales son para todos, no sólo para las grandes empresas", dijo Fernando Rojas, director de Publicidad y Franquicia.
La empresa ofrece los servicios de manejo de redes sociales, estrategias, contenido, moderación de comunidades y medición de resultados. Además cuentan con un programa llamado 'Promos', el cual ya está patentado en México, Estados Unidos, Europa y Brasil; éste capta promociones en redes sociales de todo tipo y empresa y los reúne en una sola cuenta para darles promoción. También son autores de dos libros: "Facebook para la empresa en 4 pasos" y "Twitter para la empresa en 4 pasos".
Además de su unidad propia en Mérida y la franquicia master en Madrid, Creativos Prácticos cuenta con franquicias en Culiacán, Querétaro y dos más en el Distrito Federal.
Actualmente la empresa da servicio a cerca de 140 empresas de todos los giros, y los socios son presidentes de la Comisión de Impulso y Desarrollo de Redes Sociales de la Concanaco, con lo que les ayudan a las 255 cámaras de comercio con sus estrategias de redes sociales.
La inversión inicial para hacerse de una franquicia es de 250 mil pesos, monto que incluye la cuota de franquicia, renta de local, pago a empleados, entre otros para los tres primeros meses de operación. La utilidad para el franquiciatario es del 30 por ciento y el retorno de inversión es a un año. Se requieren entre tres y cuatro empleados para operar la unidad.
"La función de la franquicia es la de ventas, es decir, conseguir a los clientes y nosotros nos encargamos de la gestión de las redes sociales, y se dividen las ganancias entre ambas partes. Lo que ha sido un reto, pues en España, por ejemplo, hemos tenido que aprender cómo se manejan las empresas, a hablar y a entender ese mercado", explicó Rojas.
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