América Móvil asegura que la obligación de prestar servicios a sus competidores sin cobrar tarifa alguna, es decir, cumplir el mandato de la tarifa cero, orilló a Telmex y a Telcel a solicitar el amparo de la justicia para defenderse de lo que considera una arbitrariedad, pues asegura que la regulación asimétrica impuesta en su calidad de agente económico preponderante en telecomunicaciones no es sinónimo de ofrecer servicios gratuitos a sus rivales.
La tarifa cero es la prohibición legal establecida en el inciso a) del artículo 131 de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión que obliga a América Móvil a no cobrar a sus competidores por la terminación de llamadas en su red.
La empresa controlada por Carlos Slim detalló que el amparo que está en discusión en la Corte abordará si este artículo en la ley secundaria es constitucional o no, al considerar que "la 'tarifa cero' no sólo invadió facultades del IFT (...) también invadió los derechos de Telmex y Telcel" al eliminar su derecho de recuperación de costos y a la estabilidad económica y equilibrio financiero que dichas concesiones le otorgan
"La certeza jurídica necesaria para las inversiones debe ser para todos, no sólo para los operadores extranjeros y sus asociados, agremiados de la "Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti). Telmex y Telcel, empresas mexicanas y principales inversionistas y generadores de empleo en el sector de las telecomunicaciones del país también tienen derecho a ella", subrayó en un comunicado.
En ese sentido, desmintió la postura de esta cámara al asegurar que la eliminación de subsidios -como América Móvil llama a la tarifa cero- no afecta los precios ofrecidos a los consumidores dado que son el mercado y la competencia los que definen los precios, no los subsidios.
Asimismo, precisó que salvo en el servicio de TV de paga, la baja de precios en los servicios de telecomunicaciones es resultado de factores como una intensa competencia existente, grandes inversiones en infraestructura, mayor uso de datos y tecnología, alza en la productividad y eficiencia en los costos de los operadores.
Además, tachó de falsas las afirmaciones que la Canieti publicó la víspera en un desplegado en diarios de circulación nacional al asegurar que no solo no consideró a Telmex ni a Telcel en los datos referentes a la generación de empleos e inversión, sino que no refirió la falta de regulación asimétrica en el mercado de TV de paga así como el monopolio regional existente y falta de convergencia en TV por cable.
Telmex y Telcel reiteraron su compromiso de inversión para impulsar el desarrollo de las telecomunicaciones en el país y para mantener la vanguardia tecnológica en beneficio de sus clientes.
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