Empresas

Slim acelera sus negocios con Pemex


 
 
Mario Maldonado

Si bien Carlos Slim tiene negocios con Pemex desde hace más de una década, su presencia nunca había sido tan notoria como en el último año. Entre junio de 2012 y el primer semestre de 2013 las firmas del empresario mexicano obtuvieron contratos con la paraestatal por más de 1,000 millones de dólares y se alista para aprovechar las oportunidades que vengan con la reforma energética.
 
 

Grupo Carso, el conglomerado que aglutina las empresas de construcción de plataformas y perforación de pozos de Slim, ha ido desincorporando sus negocios comerciales, mineros e inmobiliarios, para dedicarse de lleno a la edificación e infraestructura, una jugada con la que podría estar preparándose para la eventual apertura del sector energético.
 
 
Fue en 2006 cuando Swecomex, una subsidiaria de Carso, obtuvo uno de los contratos más jugosos con Pemex para la perforación y construcción de pozos el sur del país, el cual ascendió a 400 millones de dólares. Más adelante, en junio del 2012 Grupo Carso recibió una buena noticia: Pemex le asignó un contrato por 205 millones de dólares para la fabricación de tres plataformas marinas de producción en la Sonda de Campeche, las cuales se comprometió a ejecutar en 17 meses.
 
 
Los inversionistas apenas digerían la noticia cuando en mayo de 2013 el grupo de Slim anunció que su subsidiaria Operadora CICSA firmó un contrato de arrendamiento, sin opción a compra, con Pemex Exploración y Producción, por un importe de 415 millones de dólares siete años.
 
 

La jugada más reciente del llamado 'hombre más rico del mundo' fue en junio pasado, cuando informó que Pemex le adjudicó a Seguros Inbursa la póliza integral con la cual contratará los servicios de aseguramiento de daños físicos directos para todas sus instalaciones en tierra y mar. El monto del contrato ascendió a 426 millones de dólares.
 
 

"Grupo Carso debería beneficiarse de una posible reforma energética en México", reconoce Luis Vallarino, analista de Accival Casa de Bolsa. No obstante, debido a que las modificaciones estructurales todavía no están claras, es difícil cuantificar el potencial de crecimiento de la empresa en este negocio.
 

CICSA, cobra relevancia
 

Tras la desincorporación de Sanborns, CICSA –donde se agrupan las filiales de construcción– es la segunda firma más grande de Carso en ingresos y flujo, ligeramente abajo de Condumex, empresa dedicada al sector industrial. Dentro de la propia CICSA, el negocio de construcción y perforación petrolera está cerca de convertirse en el más importante, superando al de instalación de ductos, según un reporte de HR Ratings.
 

Para Carlos González, director de Análisis de Monex, la estrategia de escindir algunas subsidiarias de Grupo Carso y concentrarse en el sector industrial y de construcción, hace sentido si la firma planea buscar de manera más afilada contratos con Pemex, tras la implementación de la reforma energética.
 
 
 

También lee: