Desde 2010, año en el que inició actividades el Sistema Nacional de Gestión de Residuos de Envases y Medicamentos (SINGREM), al mes de mayo, el organismo logró recolectar alrededor de mil toneladas de medicamentos caducos, captados y destruidos, por lo que han retirado el equivalente a 83 camiones de ese tipo de productos, comentó José Antonio Aedo, director general de la organización.
El organismo, cuya labor es recolectar los medicamentos caducos en el país para evitar la venta ilegal de los mismos y la contaminación al medio ambiente, busca contar con cobertura nacional para el 2016, ya que actualmente poseen contenedores de recolección en 24 entidades, comentó el directivo.
"La problemática es que en la mayor parte de los casos, las familias conservan los medicamentos caducos y los tiran a la basura o al drenaje, lo que ocasiona la reventa ilegal y contaminación, por lo que buscamos evitar una afectación a la salud y el impacto negativo al medio ambiente", comentó en conferencia de prensa.
Únicamente en este año, Singrem espera terminar con al menos 500 toneladas de medicamentos caducos.
Comentó que en América Latina, México es de los países con mayor avance en recolección, aunque Brasil también registra un fuerte programa para deshacerse de los medicamentos caducos, el cual es realizado por el gobierno del país.
"La ciudad de México es la zona geográfica que más aporta al volumen de este tipo de desechos, con 22 por ciento; en segundo lugar está el Estado de México, donde se alcanza el 20 por ciento; mientras que Guanajuato se ubica en la tercer posición con 7 por ciento. Existen oportunidades importantes en los demás estados, pero todos suman para que en este momento 55 millones de mexicanos se beneficien de este programa gratuitamente", indicó Aedo.
Indicó que el financiamiento para llevar a cabo sus labores es realizado en su totalidad por la industria privada del sector farmacéutico, donde participan alrededor de 100 laboratorios, que en este año podrían aportar alrededor de 40 millones de pesos.
Para el 2016, se podrían necesitar aproximadamente 60 y 70 millones de pesos, para contar con un programa maduro, comentó José Antonio Aedo.
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