La rutina ha sido la misma durante décadas. Fanáticos del futbol alrededor del mundo compran sobres de estampas con los rostros de los jugadores que participarán en la Copa del Mundo para pegarlas en el álbum que Panini ha publicado desde la edición de México 1970.
Este año, las cosas son distintas y los coleccionistas no están felices.
Por primera vez, entre los sobres que contienen imágenes de estrellas como Lionel Messi o Cristiano Ronaldo, los fanáticos en algunos países también encuentran estampas con los logos de los patrocinadores del Mundial.
En la misma sede del evento, Brasil, donde un frenesí coleccionista tiene lugar cada ciclo mundialista, a los fanáticos se les ha dicho que no pueden cambiar los cromos de marcas patrocinadoras por otros de jugadores.
"Es absurdo porque pagas por recuerdos del Mundial y no para acordarte de los anuncios", dijo Bernardo Brasil, de 28 años, en la entrada de un centro comercial de Río de Janeiro donde decenas de personas se reúnen para intercambiar sus estampas.
"Es un error. Podrían haber incluido cromos de algo más a tono con el Mundial, como de los entrenadores, en lugar de publicidad que sólo los beneficia a ellos", añadió.
Actualmente, el grupo italiano Panini cumple un acuerdo de asociación con la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) que ha durado dos torneos.
En un e-mail dirigido a coleccionistas, el grupo asegura que incluir a los patrocinadores en las tarjetas permite la distribución gratuita de más de 6 millones de álbumes alrededor del mundo.
Compañías como Coca Cola y Adidas son la segunda fuente de ingresos de la FIFA. El año pasado, pagaron 404 millones de dólares para asociarse con el Mundial, según la propia federación.
Bernardo Brasil dijo estar frustrado por tener que pagar por estampas que ayudan a Panini a beneficiarse de la publicidad.
El fabricante, por su parte, aseguró que incluir esas imágenes estaba justificado porque el álbum no estaría completo si le falta alguna de las 649 figuras para las que tiene espacio.
"No obstante", señaló, "si alguien considera que las estampas de los patrocinadores oficiales no son parte del álbum y se siente agraviado, Panini hará un cambio sin costo".
FIFA argumenta que a los socios comerciales se les ofreció la oportunidad de "crear un vínculo con los coleccionistas de Panini y sumarse a la emoción en algunas áreas, como en Brasil".
Pero hasta la presidenta brasileña, DIlma Rousseff, quien colecciona las estampas de Panini junto con su nieto de 3 años, ha mostrado preferencia por pasadas versiones del álbum porque eran más fáciles de llenar y no tenían tantos elementos visuales, según reportó el diario Folha do Sao Paulo.
Además de las estampas de los 32 equipos que participan en el Mundial y los patrocinadores, los coleccionistas deben juntar imágenes de los estadios, mascotas y el balón oficial del evento.