Cuando Amazon estrenó este año un documental sobre el Manchester City, uno de los equipos más grandes de Inglaterra, los espectadores pudieron acceder al vestuario mientras los jugadores del equipo de Pep Guardiola marchaban rumbo a la conquista del campeonato en la Liga Premier.
Su rival Netflix escogió un camino completamente distinto para ilustrar cómo el deporte domina ciertos aspectos de la vida británica: la historia de un fracaso.
Tras All or Nothing, el retrato que hizo Amazon de la conquista del título por el Manchester City, Netflix tiene programado para el mes que viene el estreno de una serie sobre el Sunderland AFC, el equipo de futbol de esa ciudad que hoy es sinónimo de la rebelión contra el Brexit en el Reino Unido.
Durante el período más desastroso de su historia, el Sunderland cayó de la Liga Premier hasta la tercera división en dos temporadas e hizo que su exdueño estadounidense perdiera casi 200 millones de libras esterlinas (260 millones de dólares).
Ésta podrá ser una pequeña parte de la competencia entre los dos servicios de streaming, pero refleja la incursión cada vez más amplia de la programación por los bastidores del deporte pensada para los fanáticos del futbol… aunque implique adversidades además de gloria.
Mientras que Amazon siguió la carrera del Manchester City hacia un título que vale 150 millones de libras en ingresos por derechos de televisión y premios, el objeto de estudio de Netflix es un gigante caído que necesita dinero de forma desesperada.
Hace menos de dos años, el Sunderland recibió al Manchester City en la Liga Premier. Su próximo partido de local, el 17 de noviembre, es contra el Wycombe Wanderers, un equipo que nunca ha superado la tercera división inglesa.
"Seguir a un club como el Sunderland refleja de forma más auténtica las emociones y realidades de la mayoría de los fanáticos del deporte que la historia del club más rico del mundo", dijo Leo Pearlman, cineasta británico que dirigió la serie Sunderland til I die (Del Sunderland hasta que muera) y es hincha del equipo.
Desesperados por dinero
Los ínfimos pagos por derechos de televisión que recibirá el Sunderland esta temporada en la tercera división acarrean una pérdida anual de aproximadamente 12 millones de libras para el equipo.
Su director ejecutivo, Charlie Methven, afirmó que con el documental de Netflix buscan achicar las pérdidas del club en cerca de cuatro millones de libras al año para el fin de esta temporada, con una combinación de mayores ingresos y recortes de costos.
Sin embargo, el Sunderland, cuyo dueño actual es el empresario de seguros Stewart Donald, no recibirá nada directamente de Netflix, pero espera beneficiarse comercialmente con la publicidad y las oportunidades de vender mercancía que surja de la serie.
Los nuevos propietarios del equipo también están tratando de 'conectar' con el público: toman tragos con los hinchas durante los partidos y se les ha fotografiado pintando los asientos del estadio
Pero detrás de esa fachada persiste la inquietud por las finanzas, mientras los dueños tratan de atraer a entidades de préstamo y pagar el resto del precio de compra de 40 millones de libras al expropietario Ellis Short, fundador de una empresa de capital privado que invierte en inmuebles en dificultades financieras.
Y si el club logra recuperarse, Netflix ya tiene planeada una segunda temporada que se concentrará en cómo le va al equipo con su nuevo dueño.