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Gruma se redime luego de crisis por desastre de derivados

La mayor productora de tortillas del mundo se ha valido de ventas de activos para reducir el nivel de apalancamiento al más bajo en 18 años y a la mitad del nivel de 2008.

Gruma, la mayor productora de tortillas del mundo, ha tenido éxito luego de siete años de intento de redimirse ante las compañías de calificación crediticia. Para los tenedores de bonos, sin embargo, la compañía aún no recibe lo que merece.

Si bien Gruma recuperó el grado de inversión de Standard Poor's el 27 de marzo, sus costos crediticios de referencia indican que la nota debería ser aun más alta. Sus 400 millones de dólares de pagarés con vencimiento en 2024 rinden 0.85 puntos porcentuales menos que el promedio de las firmas de mercados emergentes que comparten la nota BBB-.

La productora de tortillas se ha valido de ventas de activos para reducir el nivel de apalancamiento al más bajo en 18 años y a la mitad del nivel de 2008, cuando la caída de 20 por ciento del peso alimentó pérdidas en los contratos de derivados. Luego de llegar al borde de la quiebra en 2009, ahora tiene calificaciones altas de S&P y de Fitch Ratings, lo cual la convierte en la única de las tres llamadas ángeles caídos de México que logra esa hazaña desde que se las redujo a basura en 2008.

"Las calificaciones subestiman su fuerza financiera", dijo por teléfono desde Viena Eric Janca, que contribuye a la administración de mil 800 millones de dólares de bonos empresariales, comprendidos pagarés de Gruma, en Hypo Capital Management AG. "Se negocia por encima de su calificación, y es por eso que pienso que obtendrá una mejora de nota".

AJUSTE DE MÁRGENES

Gruma no contestó una solicitud de declaraciones en horarios habituales de actividad el 10 de abril.

La calificación de Gruma, que es ahora de BBB-, el grado de inversión más bajo, está cuatro niveles por encima de su nadir de B+ de 2008, cuando la compañía dio a conocer una pérdida neta récord de mil 100 millones de dólares conforme se revirtieron las apuestas a un fortalecimiento del peso. Las cosas llegaron a tal punto ese año, que la firma tuvo que tomar deuda para pagar un ajuste de márgenes sobre los derivados, lo que llevó sus bonos perpetuos –retirados desde entonces- a un bajo nivel de 33 centavos por dólar.

La debacle formó parte de alrededor de 4 mil millones de dólares de pérdidas de apuestas a derivados cambiarios en el caso de compañías mexicanas, entre ellas Controladora Comercial Mexicana, Vitro y Cemex, cuando el peso se derrumbó luego de la quiebra de Lehman Brothers Holdings. Comercial Mexicana y Vitro, que ya tenía calificación basura, terminaron en un impago, mientras que Cemex necesitó financiamiento bancario de emergencia para mantener los pagos de deuda. Cemex aún tiene calificación basura.

Los rendimientos de los bonos de Gruma han declinado 0.61 puntos porcentuales desde su emisión en noviembre y han llegado a 4.08 por ciento, según datos que recopiló Bloomberg. La prima sobre los bonos del Tesoro de los Estados Unidos es ahora de 2.14 puntos porcentuales, en comparación con un promedio de 2.99 puntos porcentuales de sus pares en cuanto a nota.

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