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Gicsa aumenta su 17% flujo operativo en 4T16 por nuevos ‘malls’

La apertura de dos nuevos centros comerciales y el aumento de 9 por ciento en el precio de la renta de los inquilinos que ocupan sus inmuebles le valió a la empresa un incremento de 17 por ciento en su flujo operativo en el cuarto trimestre de 2016.

La apertura de dos nuevos centros comerciales y el aumento de 9 por ciento en el promedio de la renta pagada por los inquilinos que ocupan sus inmuebles, le valió a la desarrolladora inmobiliaria Gicsa un incremento de 17 por ciento en su flujo operativo durante el cuarto trimestre de 2016 a 758 millones de pesos, respecto al mismo lapso de 2015.

De acuerdo con el reporte enviado por la empresa a la Bolsa Mexicana de Valores, la firma que dirige Abraham Cababie experimentó un crecimiento de 11 por ciento en sus ingresos, a 572 millones de pesos en el periodo de octubre a diciembre de 2016, comparado con el cuarto trimestre de 15.

"Con respecto a nuestro desempeño operativo cerramos el año con sólidos indicadores. Cerramos el año con una tasa de ocupación de 90.4 por ciento en nuestras propiedades y una tasa de renovación del 9 por ciento, una importante muestra de la demanda por espacios comerciales y de oficinas", explica el reporte.


Gicsa cuenta con 16 proyectos en desarrollo de los cuales 9 ya iniciaron su construcción; con relación a los 7 proyectos restantes se continúa conforme a lo planeado, con la ejecución de las actividades y procedimientos requeridos para el inicio de actividades de construcción.

"Al 4T16, Gicsa se constituye por 13 propiedades estabilizadas y 2 en proceso de estabilización, están conformadas por nueve centros comerciales, cuatro desarrollos mixtos (los cuales cuentan con centros comerciales, edificios de oficinas corporativas y un hotel de lujo) y dos proyectos de oficinas corporativas, con una antigüedad promedio de 8 años", puntualiza el documento.

En tanto, la utilidad neta de la desarrolladora cayó 1.35 veces derivado de un aumento de casi 3 veces en los costos financieros a causa de la devaluación que sufrió el peso frente al dólar en los últimos meses de 2016.

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