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En el futuro de Fiat Chrysler, los autos compactos 'ya no tienen lugar'

Sergio Marchionne, CEO de la compañía, planea abandonar la producción de vehículos como el Punto y Mito para centrarse en vehículos de lujo como el Maserati.

En su jugada final destinada a transformar a Fiat Chrysler, Sergio Marchionne, el máximo responsable de la compañía, está volviendo al lugar donde empezó todo: Italia.

El CEO se prepara para revelar el próximo 1 de junio una transformación generalizada de la producción en Italia a través de la cual la empresa abandonará la fabricación de los autos económicos Punto y Mito en favor de modelos de alta gama, según personas con conocimiento del plan.

Una planta histórica en Turín y otra cercana a Nápoles serán reestructuradas para producir nuevos Maserati y vehículos utilitarios deportivos Jeep, en tanto que la producción del Panda se trasladará a Polonia, dijeron personas que pidieron no ser identificadas dado que el proyecto no es público.

Los cambios en sus raíces italianas completarán un vuelco histórico para la compañía fundada en 1899 que creció hasta convertirse en un símbolo del boom industrial del país en la posguerra a través de la producción de autos, como el Fiat 500 subcompacto, a los que podían acceder los consumidores comunes.

Este nuevo objetivo forma parte del último programa estratégico de Marchionne destinado a llevar la producción europea occidental hacia los autos de nivel superior, impulsar la venta de los Jeeps en el mundo entero y hacer pasar a la automotriz del diésel a los autos eléctricos híbridos, comentaron las personas.

Aún no se toma una decisión definitiva sobre el plan para Italia y algunos detalles aún podrían cambiar antes de la presentación del mes próximo, agregaron. Fiat Chrysler no dio declaraciones al respecto.

Marchionne, quien se retirará como CEO de la compañía el próximo año, no le ve futuro a la fabricación de autos accesibles en países europeos de salarios elevados, indicaron las personas al tanto de la estrategia de la automotriz.

El ejecutivo italiano ha dicho que, en el contexto de la transición que habrá durante la próxima década en la manera de propulsar, conducir y comprar vehículos, esta "parte de la industria automotriz corre el riesgo de verse mercantilizada".

Con los cambios en la producción italiana, Fiat Chrysler abandonaría este mismo año la de su viejo modelo Punto en la fábrica de Melfi, en el sur de Italia, apuntaron las fuentes informadas sobre el tema.

El Alfa Romeo Mito detendría su producción en la planta principal de Turín, conocida como Mirafiori, donde probablemente se sume un segundo vehículo utilitario deportivo Maserati como un agregado al modelo Levante que ya está saliendo de sus líneas de montaje.

La fábrica de Turín es el centro histórico de Fiat. Fue inaugurada por el dictador Benito Mussolini en 1939 y llegó a emplear 50 mil trabajadores en sus días de gloria durante los años setenta. La planta produce en la actualidad menos de 50 mil autos al año en comparación con su pico máximo de más de 60 mil.

En otra fábrica en Pomigliano, cerca de Nápoles, hogar del líder del movimiento Cinco Estrellas Luigi Di Maio, Fiat Chrysler comenzará a fabricar un pequeño SUV Jeep, una vez trasladada la producción del subcompacto Panda a Polonia, explicaron las personas.

La estrategia de Fiat Chrysler, que se centra en la expansión de la marca Jeep, también marcará el fin de los motores diésel en los vehículos europeos pequeños del fabricante. En adelante, éstos funcionarán con motores eléctricos híbridos. Es probable que la marca Fiat quede circunscrita sólo a los modelos 500 y Panda en Europa mientras se discontinuan otros autos económicos, dijeron las personas.

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