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Diputados de la Comisión de Transportes aprobaron un dictamen para impulsar mayor competitividad y seguridad en el sector de aeronáutica mexicana, y así regular sus actividades en un marco de equidad y certeza jurídica.
En el documento se argumentó que con estas 14 modificaciones jurídicas en el sector de la aviación se abren caminos para afianzar la competitividad.
En particular oportunidades para instalar y fomentar la infraestructura, a través de reglas claras que eviten la sobrerregulación que implicó en el pasado el rezago de este sector.
El presidente de la comisión, Juan Carlos Muñoz Márquez, señaló que este dictamen que reforma diversos artículos de las leyes de Aviación Civil y de Aeropuertos dará certeza jurídica al sector aeronáutico para regular el cabotaje e impedirá la simulación del servicio de taxi aéreo.
También prevé el incumplimiento con las medidas de seguridad y homologar la certificación de los talleres mecánicos, por lo que las faltas se castigarán con la revocación de los permisos, multas equivalentes de 10 a 25 mil salarios mínimos y hasta la inmovilización de la aeronave.
El legislador comentó que con esas modificaciones se reconoce a los talleres aeronáuticos y centros de capacitación extranjeros, y se homologan los nacionales con la finalidad que las aeronaves con matrícula mexicana puedan certificarse en sus condiciones técnicas tanto en el país como en el exterior.
De esta manera, abundó, se garantizan altos estándares de seguridad, eficiencia y calidad en la operación de la navegación aérea, por lo que la vigencia del certificado de aeronavegabilidad será de dos años.
Además se otorgará el permiso de licencia de estación de la aeronave con vigencia indefinida, excepto cuando cambien las características del equipo y la matrícula del vehículo, por lo que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) podrá suspender o cancelar el certificado por incumplimiento de los requisitos.
Además se eliminan trámites innecesarios a los aeródromos localizados en zonas alejadas a las ciudades, como ranchos y zonas rurales, que por su condición y naturaleza no requieren estudios adicionales.
Muñoz Márquez destacó que esto permitirá "ampliar la base de aeródromos que pueden existir en el país con una desregularización y hacerlo más accesible".
Añadió que con ello la iniciativa privada podrá invertir en el sector "sin necesidad que forzosamente el Estado entregue una concesión, ya que simplemente con tener y cumplir las condiciones adecuadas de un aeródromo, que en su momento pueda convertirse en un aeropuerto, se da la oportunidad de participar".
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