Al menos mil viviendas abandonadas en Tultitlán y Huehuetoca, Estado de México, han sido invadidas por bandas del crimen organizado, que han aprovechado el descuido de las autoridades para apropiárselas, denunció la Comisión de Coparmex del Valle de México.
Las propiedades, que cuentan con una garantía hipotecaria del Infonavit y Sociedad Hipotecaria Federal, suman una pérdida equivalente a 2 mil 375 millones de pesos aproximadamente, según datos del organismo.
Antonio González, presidente de la Comisión aseguró que desde hace 5 años ha ido creciendo este tipo de delitos por parte de grupos organizados y maras, los cuales se adueñan de las casa que identifican como abandonadas o deshabitadas y las rentan a inmigrantes centroamericanos.
"Vienes en el tren "La Bestia", y por alguna razón te quieres quedar y tienes dólares o pesos. Te quedas en Huehuetoca, no tienes papeles que te avalen y llega un cuate y te dice te rento esta casa por 500 pesos, y algunas de esas personas son Maras", describió González.
Resaltó que aunque empresarios han levantado denuncias, las autoridades locales entorpecen las investigaciones, lo que hace pensar que están coludidas autoridades.
Pese a esta situación, las pequeñas constructoras continuarán con el legado que dejaron las vivienderas emproblemadas, y construirán casas en las ciudades en donde se ha registrado altos niveles de abandono.
En el Estado de México se calcula que hay 9 mil 500 viviendas abandonadas. Para este año se esperan construir 22 mil 844 viviendas en este año en Tecamac, Huehuetoca, Acolma y Nicolás Romero.