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Creacero apuesta a ser una franquicia innovadora


 
Adriana Rodríguez Canales
 
La ingeniería civil estructural ha tenido un gran desarrollo en nuestro país, debido al reto que representa diseñar estructuras resistentes a los embates de la naturaleza, como son los sismos y los huracanes. Sin embargo, desde hace más de 25 años no se había creado en México una tecnología enfocada en esta materia con la posibilidad de ser exportada.
 
Esta racha negativa fue rota por la empresa Ingeniería Creativa en Acero (Creacero), que diseñó un perfil de acero con tres atiesamientos -con beneficios como ahorro de materiales y mano de obra, mayor eficiencia y aprovechamiento de la pieza, así como mayor flexibilidad en su uso- y la máquina que los fabrica.
 
Además, siguiendo con su directriz innovadora -implementada por el fundador de la empresa, ya fallecido, Federico Martínez Zepeda-, la firma ha decido incursionar en el modelo de franquicia, ofreciendo a los inversionistas la posibilidad de adquirir la máquina y modelos de ingeniería que les permiten hacer sus propias construcciones.
 
Mayor resistencia
 
"El perfil tradicional que se comercializa en el mercado es recto, tanto en el patín como en el alma, lo que a cierto esfuerzo ya no le permite trabajar en su totalidad a la compresión ni a la flexión, y limita su capacidad de cargas; mientras que el perfil Creacero cuenta con tres atiesamientos, lo que propicia que toda la superficie trabaje y aumenta su capacidad de resistencia.
 
"Ofrece un mayor radio de giro, un mayor momento de inercia y un mayor módulo de sección; esto hace que el perfil no se tuerza y soportará más esfuerzo, aproximadamente cuatro veces más que el perfil tradicional", explicó Alberto Cornejo Lizarralde, director general de Creacero.
 
"Comparados con otros perfiles, se puede alcanzar un ahorro de hasta 60% en la cantidad de acero en las mismas cargas y longitudes, porque se pueden dar claros (piezas) más largos y no se requiere soldar varias piezas. Hemos podido lograr estructuras de cien metros de largo sin necesidad de columnas. Al tener menos peso también podemos lograr ahorros en mano de obra, en material de estructuras (se requieren menos columnas) y en la cimentación", agregó.
 
El perfil ya ha sido utilizado en diversos proyectos especiales, como en naves industriales de una cadena de tiendas de autoservicio internacional, y formará parte del proyecto de un sistema de transporte elevado (tren eléctrico) que se piensa construir en Guadalajara, donde Creacero diseñó la estructura de rodamiento de los trenes.
 
Sistema automatizado
 
El modelo de franquicia de Creacero prevé la venta de la máquina para fabricar perfiles, así como un sistema de prediseños, que permite a un inversionista crear y montar estructuras sin necesidad de ser ingenieros. Hoy en día la empresa tiene listos ya diez modelos prefabricados, que manejan estructuras desde 25 hasta 500 metros cuadrados, con diferentes geometrías.
 
"Normalmente el pequeño estructurista hace muy poco cálculo, porque no tiene una formación en ingeniería y se guía más por el sentido común, lo que conlleva que utilice más soldadura si las piezas no le ensamblan como pensó; no tiene control sobre el peso de la estructura y en costo hace un cálculo estimado, incrementándolo notablemente para protegerse de cualquier contratiempo.
 
"Con nuestros modelos prediseñados, ya se les dan las piezas totales, la conectividad, los costos y los detalles del montaje. El sistema está automatizado, de manera que una vez que se aprueba el proyecto, la máquina ya sabe cuántas piezas debe sacar y de qué tamaños; el franquiciatario no requiere ser ingeniero para armarla", afirmó el directivo.
 
Además, el sistema permite mostrarle al cliente una presentación en tercera dimensión para que pueda ver el resultado final.
 
Otra característica de los modelos es que sólo pueden ser aplicables utilizando el perfil Creacero, por lo que en caso de ser copiados utilizando otro modelo de perfil, la estructura no soportaría. "Así estamos protegiendo nuestros diseños, y que el franquiciatario pueda ofrecer un producto único en el mercado", dijo Cornejo Lizarralde.
 
Los prediseños también permiten llegar al segmento de la autoconstrucción, debido a que pueden crearse piezas con un peso máximo de 30 kilos, lo que permite que se ensamblen sin grúas ni equipo sofisticado.
 
"Ideamos un sistema de franquicias porque creemos que es la forma de llegar tanto al pequeño empresario, que quizá tenga un taller de estructuras, pero que las fabrica de modo artesanal, hasta grandes constructoras. Deben ser empresas constituidas formalmente, que conozcan el mercado, que lo estén trabajando actualmente y que se surtan de elementos constructivos que adquieren a través de los proveedores industriales, o que sean proveedores", comentó por su parte Herón Colín Suárez, director general adjunto de Creacero.
 
Sin embargo, la flexibilidad del modelo permite que pueda ser adquirido por inversionistas sin experiencia que buscan ser proveedores de grandes constructoras, y que tengan el capital para adquirir una máquina.
 
La inversión
 
Creacero está franquiciando dos modelos de máquina. El primero es una máquina universal, que fabricará los cinco tamaños de perfiles -4, 6, 8, 10 y 12 pulgadas- y de 3 diferentes espesores de lámina -calibres diez, 12 y 14- en acero A50. Esta máquina requiere de una inversión de 445,000 dólares.
 
El segundo producirá el perfil que el inversionista requiera acorde al mercado específico que esté manejando. La empresa estima que la mayor demanda estará en los tamaños cuatro, seis y ocho; en calibres 12 y 14. El costo de esta máquina es de 295,000 dólares.
 
"Además de la ingeniería de los prediseños, la empresa pondrá a disposición de los franquiciatarios una máquina universal, en caso de que la propia se descomponga, requiera mantenimiento o perfiles para un proyecto en específico y su máquina no esté diseñada para fabricarlos. En caso de proyectos especiales, podemos apoyarlo con nuestro Departamento de Ingeniería en el diseño de éste", dijo Colín Suárez.
 
Información proporcionada por El Financiero Bajío.
 
 

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