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¿Cómo el CEO de Nissan pasó de ser 'desafiante' a despedido en 24 horas?

Hiroto Saikawa parecía muy seguro de mantenerse en el cargo tras el escándalo Ghosn; sin embargo, la Junta de la compañía decidió expulsarlo por unanimidad.

El director general de Nissan, Hiroto Saikawa, habló el domingo de su futuro como director ejecutivo la firma japonesa con un tono desafiante cuando aceptó la responsabilidad por los escándalos de Carlos Ghosn y prometió ceder el liderato a una nueva generación. Un día después todo explotó.

La estrategia de Saikawa reventó 24 horas más tarde cuando la Junta de Nissan lo expulsó, citando su exceso de compensación. El último día del aún directivo será el 16 de septiembre, y la junta está analizando un grupo de unos 10 candidatos para el puesto.

El final de las cuatro décadas de la carrera de Saikawa se produjo en una sala de conferencias en la sede de Nissan en Yokohama, a unos 27 kilómetros al sur de Tokio, donde los miembros de la Junta se reunieron durante más de cinco horas, y algunos se unieron por video desde el extranjero, según personas familiarizadas con el asunto.

Nissan declinó hacer comentarios sobre las discusiones de la Junta y declinó hacer que Saikawa esté disponible para hacer comentarios.

El socio de la alianza, Renault, estuvo representado por el presidente Jean-Dominique Senard y el director ejecutivo Thierry Bollore.

Durante la reunión, los directores dijeron que no estaban contentos con el lento progreso en la búsqueda del reemplazo de Saikawa, y expresaron que querían que ese proceso se acelerara, según las fuentes, que pidieron no ser identificadas. Saikawa dijo en una conferencia de prensa en enero que "pasaría el testigo" a los nuevos líderes lo antes posible.

Los miembros de la Junta discutieron la investigación interna sobre las acusaciones de que Saikawa y otros ejecutivos recibían más de lo que tenían derecho, según la gente. El informe fue preparado por un equipo dirigido por Christina Murray, la jefa de cumplimiento saliente, y partes del mismo fueron mostradas a los directores.

El documento contenía acusaciones de mala conducta financiera por parte del expresidente Carlos Ghosn, quien gobernó Nissan durante dos décadas, y el exdirector Greg Kelly. Pero lo más importante en cuanto a Saikawa, había detalles sobre su paga.

Días antes, la compañía confirmó que le pagaron en exceso 47 millones de yenes, es decir, 438 mil dólares a través de los derechos de revalorización de acciones.

La controversia salió a la luz por primera vez después de que Kelly acusó a Saikawa, de 65 años, en una entrevista en una revista en junio de recibir una compensación indebida.

El domingo, Saikawa habló afuera de su casa de Tokio, antes de la reunión de la Junta, y dijo que no se le debería culpar por los excesos, y que no iba a renunciar, especialmente después de ofrecerse como voluntario para devolver el dinero.

"No soy responsable de eso", dijo. "Asumiré la responsabilidad de los escándalos de Ghosn y quiero que el comité de nominaciones de la Junta encuentre un plan de sucesión lo antes posible para aprobar el testigo".

Dentro de la sala de juntas, varios directores externos dijeron que los pagos eran un problema grave, particularmente porque se produjo en un momento en que Nissan estaba tratando de fortalecer su gobierno corporativo, según las fuentes.

Saikawa respondió que no tendría que renunciar de inmediato, dijeron las personas. Más tarde, en conferencia de prensa, Saikawa dijo que lamentaba tener que renunciar antes de poder terminar todo lo que se había propuesto hacer, pero que el momento de su renuncia dependía de la junta.

Sin embargo, él y los directores discutieron una y otra vez durante algún tiempo, prolongando la reunión. Aunque Nissan no encontró ilegalidad, Saikawa no debería ser exonerado por delegar esos derechos a Kelly, dijo Motoo Nagai, Jefe del Comité de Auditoría, después de la reunión.

A raíz de la saga Ghosn, que expuso las deficiencias de la compañía cuando se trataba de vigilar el pago ejecutivo. Nissan dibujó una línea en la arena.

Finalmente, preocupado por la percepción del compromiso de Nissan con la reforma y la necesidad de mostrar un sentido de urgencia para cambiar las cosas, las discusiones se intensificaron en la última hora y la junta decidió por unanimidad eliminar a Saikawa y buscar el tercer CEO de la compañía.

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