La química The Chemours Company quiere 'apostar' más en México. El grupo evalúa una inversión de 120 millones de dólares para abrir una planta de químicos enfocados a la industria minera del país, lo que dependerá de la capacidad de Pemex para abastecer amoniaco.
En entrevista, Luis Rebollar, director general de la compañía en el país, dijo que para The Chemours Company es importante desarrollar sus tres divisiones de negocio, a fin de ser proveedores de las empresas mineras, sector relevante para la economía nacional.
"Utilizamos gas natural, pero no es un problema puesto que podemos importarlo, el amoniaco sí es un problema, debemos encontrar un lugar adecuado para importarlo si Pemex no puede surtirlo, pero lo adecuado es que ellos nos lo puedan vender", destacó el ejecutivo.
Producto de la escisión de los negocios químicos de DuPont en 2015, Chemours considera a México como uno de sus mercados más importantes fuera de Estados Unidos ya que le aporta 9 por ciento de los ingresos consolidados.
"El 2016 ha sido muy bueno para nosotros, porque efectivamente cuando nos separamos de DuPont el año pasado fue difícil. La reorganización se juntó con una caída en la demanda global de químicos y nos vimos presionados en los márgenes, pero ya logramos avanzar", recordó Rebollar.
Por el reordenamiento, añadió, Chemours tuvo que cerrar algunas plantas de Estados Unidos, pero esta situación no afectó la operación en México.
En lo que va del presente año, el valor de los títulos de Chemours en la Bolsa de Nueva York acumula una ganancia de 203.2 por ciento, al cotizarse en los 16.25 dólares por papel.
CON EL COSTO MÁS BAJO
Chemours tiene el costo de producción sustentable de titanio más bajo en el mundo en su planta que opera en Altamira, Tamaulipas, debido a su escala de instalación, su proceso patentado y su experiencia, así como por su capacidad de utilizar una amplia variedad de materias primas minerales.
La compañía estadounidense anticipa que reducirá los costos generales de la producción de titanio por una cantidad de por lo menos 20 millones de dólares anuales.
Esta empresa cuenta con una deuda cercana a los 4 mil millones de dólares, los cuales fueron utilizados para pagar la escisión del negocio de Dupont que se llevó acabo en julio de 2015. Se trata de un pasivo que representa tres veces su flujo de efectivo.
