Los consumidores estadounidenses han sido los afectados en los aranceles a la importación de lavadoras que impuso el gobierno de ese país, ya que han tenido que pagar un mayor precio en los últimos meses por estos electrodomésticos.
Entre abril y mayo de este año sus precios acumularon un crecimiento histórico de 18 por ciento anual, de acuerdo con los datos del Departamento del Trabajo de ese país.
Repuntaron 9.6 por ciento en abril, respecto al mes previo, un incremento sin precedente, desde que hay registros disponibles en las cifras ajustadas por estacionalidad, a partir de 2006. Durante mayo el incremento fue de 7.4 por ciento.
Los aranceles impuestos por el gobierno estadounidense estarán vigentes por tres años y también incluye las refacciones de las lavadoras, con cuotas que van del 20 al 50 por ciento en este 2018 y en los siguientes dos años dicha tarifa va a disminuir.
Hasta el momento las exportaciones mexicanas de lavadoras a Estados Unidos han sorteado los aranceles y se observa un repunte en las de menor tamaño.
Entre febrero y marzo las ventas hacia el vecino país del norte se triplicaron en las maquinas con capacidad de hasta 10 kilogramos, al reportar una alza de 221 por ciento anual, según datos de la Secretaría de Economía.