Antonio Sandoval
La bolsa de valores de Nueva York se ha catapultado hasta las nubes, los principales indicadores reportan ganancias extraordinarias a tal grado que por el momento vive uno de sus mejores años en el presente siglo.
De acuerdo con las cifras oficiales de cierre de la semana pasada, durante 2013 el índice industrial Dow Jones tiene un avance de 18.82 por ciento, el Nasdaq por su parte sube 30.6 por ciento y el S&P500 gana 23.84 puntos porcentuales, lo que incluye en éste último caso 31 máximos históricos, el más reciente registrado apenas el viernes pasado.
De mantenerse la tendencia, la plaza bursátil más influyente del mundo tendrá uno de sus mejores años en el siglo que corre, solo comparado con los beneficios que obtuvo en 2003 y 2009.
Es difícil saber si existe ya una burbuja en el mercado de valores de Nueva York, lo que es un hecho es que a pesar de los fuertes avances reportados en este 2013, los principales indicadores aun no rebasan el promedio del crecimiento que tuvieron en el periodo 1995-1999, mismo que comprendió precisamente la más reciente burbuja accionaria en Wall Street.
En ese lapso mencionado el Dow Jones avanzó 24.68 por ciento, el Nasdaq 41.89 por ciento y el S&P500 subió un promedio de 26.31 puntos porcentuales.
Otro hecho significativo es el relacionado con la trayectoria del Dow Jones, aunque en realidad no es el indicador más relevante de Nueva York en términos de su muestra sí lo es por tradición y arraigo mundial, éste índice ligará cinco años consecutivos de ganancias en caso de que mantenga su tendencia lo que resta del año, algo que se antoja muy probable.
Un factor es el que impulsa a los mercados de valores en 2013 y probablemente permitirá que se mantenga la tendencia, es el relacionado con la liquidez.
Los movimientos de las semanas recientes en Nueva York son claramente atribuibles a lo que el mercado considera un hecho, el mismo nivel de estímulos monetarios en noviembre y diciembre próximos. Es decir, compra mensual de 85 mil millones de dólares por parte de la Fed.
De hecho, los propios mercados empiezan a generar la expectativa de que los estímulos monetarios se mantendrán en los mismos términos al menos durante enero y febrero de 2014, lo que acumularía un total de 4 meses más con los mismos niveles de liquidez generados mes a mes desde noviembre del año 2011 cuando la Fed inició con su estrategia.
Otro factor de descuento es la incipiente recuperación económica, así actúan los mercados, aunque en el horizonte de mediano plazo están los nubarrones de la deuda y el presupuesto. De cualquier modo, Wall Street está en las nubes y al parecer no se observan indicios de una burbuja accionaria, no por el momento, mientras esa expectativa siga la fiesta difícilmente se terminará.
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