Los ingresos por ventas minoristas reportaron en agosto un aumento marginal de 0.2 por ciento, el más discreto desde agosto de 2013, es decir, cuatro años.
De acuerdo con datos ajustados por efectos estacionales del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), con el balance de agosto se logran hilar tres meses de crecimientos anuales por debajo del uno por ciento.
Se esperaba que la escalada en el nivel de precios durante este año tuviera efectos sobre el consumo de los hogares y la lectura más reciente de las ventas al menudeo parece confirmar cierta desaceleración en la demanda de este sector.
Con el dato de agosto se hilaron tres meses de alzas anuales de las ventas inferiores a uno por ciento.
Eduardo González, analista económico de Citibanamex expuso en un análisis que el crecimiento de las ventas fue menor de lo esperado.
"Ello refleja la pérdida de impulso que han tenido dichos ingresos el presente año y los resultados actuales sugieren que los ingresos de los comercios al por menor están consolidando su tendencia a la baja más rápido de lo que esperábamos", dijo.
Los resultados recientes advierten sobre una moderación en el consumo privado en el tercer trimestre.
Analistas de Grupo Financiero Monex resaltaron que la baja (con cifras originales) en tiendas departamentales, que representan 30 por ciento de los ingresos, en el comercio de abarrotes y en el segmento de alimentos, bebidas y tabaco, que explican otro 15 por ciento del ingreso, son reflejo de que el sector consumo está perdiendo impulso.
Contrastan los servicios
En tanto, el sector servicios cobró fuerza en agosto, ya que sus ingresos aumentaron 5.6 por ciento en términos anuales. Con esta cifra, el sector terciario logró la mayor expansión en un semestre, según cifras desestacionalizadas.
El avance obedece al mayor dinamismo en los servicios de apoyo a los negocios, que repuntó 14.4 por ciento anual, y en los de esparcimiento, culturales y deportivos, que crecieron 7.9 por ciento.
Por sectores de actividad, se advierte sobre débiles crecimientos en las ventas de ropa y calzado, que en comparación con el año pasado aumentaron 0.3 por ciento. Los artículos de ferretería y tlapalería avanzaron 0.6 por ciento en el mismo periodo, lo mismo que las ventas de tiendas de autoservicio y departamentales.
Sólo las ventas de vehículos de motor, como autos y motocicletas, así como sus refacciones y combustibles, cayeron respecto al año pasado 6.0 por ciento.
Por el contrario, los ingresos de papelerías fueron los más favorecidos en el mes. Respecto al año pasado, este segmento observó un alza de 7.2 por ciento. De igual forma, las ventas realizadas exclusivamente a través de internet, catálogos impresos y televisión también destacaron con un aumento de 6.3 por ciento anual.
Pese a la pérdida en el poder adquisitivo de los hogares, las ventas de enseres domésticos y equipo de cómputo se mantiene como una de las ramas de mayor crecimiento al crecer 5.7 por ciento respecto al año pasado.