La crisis petrolera no ha mellado el interés de los inversionistas y en cambio abrió oportunidades para fortalecer su posición en el sector, de acuerdo con el Barómetro sobre Confianza de Capital Global de EY, en el que 59 por ciento de los encuestados manifestaron tener apetito por realizar adquisiciones dentro del sector petróleo y gas.
La presión a la baja en los precios del crudo ha sido la preocupación central sobre el crecimiento global en el primer tercio del año, pero se estima que las compañías de petróleo y gas sucumban al estrés en el sector que motivará transacciones en este 2016. El mayor consenso sobre "precios bajos por más tiempo" del petróleo han reducido la brecha de valoración entre los compradores y vendedores, aumentando las probabilidades de más ofertas, señala el reporte "Compras y uniones: alianzas unen fusiones y adquisiciones como motores de crecimiento" de EY.
Las compañías que han mostrado resilencia entre los 40 y 50 dólares por barril, están comenzando a enfrentar angustias conforme el precio se hunde debajo de los 40 dólares. Todas las señales apuntan a un mercado más oportunista de fusiones y adquisiciones.
Las empresas de aguas arriba se están asociando en su enfoque continuo por la reducción de costos y optimización de sus carteras, esto puede conducir a una consolidación de la propiedad sobre sus principales activos conforme buscan aumentar el control sobre su gasto de capital global y maximizar las oportunidades para utilizar su capacidad operativa.
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