Los recursos destinados al Ramo 23, rubro que según expertos se caracteriza por su opacidad, falta de reglas y discrecionalidad, han sido cada vez mayores.
En los seis años del gobierno anterior, se destinó a esta partida de previsiones salariales y económicas 1.21 billones de pesos, medio billón más que lo presupuestado.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha sugerido cambios a este Ramo, por la falta de transparencia, y diputados de Morena se han pronunciado por eliminarlo o hacerle una 'cirugía mayor', lo que ha generado gran preocupación entre los gobiernos estatales y municipales.
Mariana Campos, coordinadora del Programa de Presupuesto de México Evalúa, dijo que parte de estos recursos se han destinado con mucha discrecionalidad.
"Por control político, para favorecer a gobiernos locales", por lo que es necesario crear una ley que los regule, expuso.
Indicó que a través de este Ramo se entregan fondos mediante convenios, de forma deficiente, sin evaluación de resultados, por lo que urgió a que el nuevo Congreso y la actual administración los regulen.
En consecuencia, se requiere una reforma a la Ley de Responsabilidad Hacendaria para que los convenios obedezcan a un buen diseño que garantice que la transferencia de recursos esté orientada a estados que rindan cuentas y entreguen resultados, agregó la especialista.