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El sistema tributario mexicano debe modernizarse pues no responde a las necesidades de promoción de ahorro, inversión y crecimiento de la economía, además es complejo y no ha logrado integrar a la economía informal, estimó la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra).
En su reporte semanal, considera que es momento de plantear no una reforma fiscal sino una reforma hacendaria que vislumbre la evaluación de los criterios de tributación y "vamos a ver si lo que se gasta se gasta con eficiencia".
"Se trata, en esta perspectiva, de un replanteamiento integral de la manera en la que los contribuyentes decidimos sobre el destino de los recursos públicos y, también, de la manera en la que deseamos se utilicen para el crecimiento económico, social y productivo", advierte.
Para el organismo industrial, es indispensable llevar a cabo un verdadero cambio en el sistema tributario mexicano, en el cual se tomen en cuenta los principios de eficiencia y neutralidad, simplificación y seguridad jurídica.
Debemos contar, añade, con una reforma hacendaria que facilite el pago de las obligaciones, fortalezca la recaudación, pero también que mantenga un estricto control sobre la manera en que se gastan los recursos públicos y esté basada en la incorporación de más contribuyentes.
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