La desaceleración de la actividad bancaria transfronteriza registró una mayor contracción al cierre de 2015, ante una menor demanda de crédito en el continente asiático y en los mercados desarrollados.
Un reporte del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por sus siglas en inglés), destaca que el crédito bancario transfronterizo a las economías de mercados emergentes se contrajo 8 por ciento anual en el cuarto trimestre del año anterior, lo que representó la caída más pronunciada desde 2009, luego de la crisis financiera global.
"Este debilitamiento de la actividad bancaria internacional coincidió con un deterioro de las perspectivas de crecimiento global y renovada turbulencia en los mercados financieros en el cambio de año", explicó el organismo en su informe.
Los flujos de préstamos de la banca internacional a la región de América Latina y el Caribe se contrajeron en 12 mil millones de dólares en el cuarto trimestre de 2015, impulsado principalmente por una fuerte caída en la demanda interbancaria en Brasil.
Por su parte, los créditos transfronterizos a China se redujeron en 114 mil millones de dólares en el periodo mencionado, lo que significó una caída de 25 por ciento respecto al año anterior. Excluyendo a China, los préstamos bancarios a mercados emergentes de Asia disminuyeron en 31 mil millones de dólares.
No sólo en los mercados emergentes se vieron estas contracciones, sino también en las economías avanzadas donde los pedidos de créditos transfronterizos en la zona del euro, Estados Unidos y otras economías avanzadas se redujeron en 356 mil millones de dólares, registrando una caída de tres por ciento.
Destacó el caso del Reino Unido, con una caída de 98 mil millones de dólares. Le siguieron Francia e Irlanda, con 71.1 y 51.8 mil millones de dólares.