Economía

Salud Mental, prioridad para el desarrollo global: Banco Mundial

Los estigmas y prejuicios aún mantienen a los trastornos mentales en las sombras, pero debido a que han aumentado es necesario implementar políticas globales para su tratamiento, enfatizó Jim Yong Kim, presidente del Banco Mundial.

Los problemas de salud mental son una prioridad en el tema de desarrollo global ya que cada año se pierden 1 billón de dólares debido a la pérdida de trabajo y situaciones como la crisis de migrantes en Europa y conflictos geopolíticos en diversas partes del mundo, hacen cada vez más urgente la implementación de programas gubernamentales para su tratamiento nivel mundial, según Jim Yong Kim.

Durante la mesa redonda "Salir de las Sombras: Haciendo de la Salud Mental una Prioridad para el Desarrollo Global", organizada como parte de las reuniones con el FMI, el presidente del Grupo del Banco Mundial señaló que la depresión por sí sola afecta a 350 millones de personas en el mundo y es la principal causa de discapacidad en todo el mundo.

"A pesar de la enorme carga social, los trastornos mentales continúan siendo impulsados hacia las sombras por estigmas, prejuicios y miedo y el problema se hace cada vez más urgente a la luz de la migración forzada y el conflicto sostenido que estamos viviendo en muchos países del mundo".

"Tenemos que poner la misma intensidad en el activismo sobre salud mental que cuando fue el tema del VIH/SIDA", dijo el presidente del Banco Mundial.

Expuso que no tratar el problema no es simplemente cuestión moral, también económica, a nivel mundial se pierden 1 billón anualmente debido a la pérdida de trabajo. En cambio, cada dólar gastado en el tratamiento de salud mental otorga una rentabilidad de 3 dólares como inversión.

Tras anunciar que el Día Mundial de la Salud de 2017 será dedicado a la Salud Mental, Margaret Chan, directora general de la Organización Mundial de la Salud destacó la importancia de que los gobiernos desarrollen e implementen programas para prevenir, identificar y tratar los desórdenes mentales y que la sociedad trate el tema sin estigmatizarlo bajo un enfoque de inclusión ya que es un tema de derechos humanos.

En la sociedad prevalecen tres mitos sobre los trastornos mentales: no son importantes, no son tratables y no es rentable tratarlos, señaló Arthur Kleinman, profesor de Antropología Médica, de la Escuela de Medicina de Harvard y reconoció que los programas basados en la comunidad pueden transformar las vidas de población sufriendo desórdenes mentales.

Con el desafío de 1 de cada 5 canadienses sufriendo algún tipo de desorden mental, el gobierno de Canadá destinó importante presupuesto para combatir este problema y hoy es líder mundial en los esfuerzos sobre salud mental.

"Invertir en salud mental otorga un retorno de la inversión, hace personas más eficaces", dijo William Francis Morneau, ministro de Finanzas de Canadá.

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