Las reformas estructurales en marcha en México van en el camino correcto y aun cuando tienen en contra las condiciones de la economía global, darán resultados en el largo plazo, dijo el Fondo Monetario Internacional (FMI), quien a su vez considera que el gobierno ha tomado decisiones correctas para alcanzar sus metas fiscales aun cuando la consecuencia será un menor crecimiento.
"Las autoridades mexicanas mantienen sus metas fiscales invariables pese a las fluctuaciones de los precios del petróleo y están comprometidas en alcanzarlas. La acción que ya ha indicado el gobierno con la profundización del ajuste al gasto tendrá como consecuencia un crecimiento más lento", dijo Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental.
En conferencia de prensa desde Washington sobre las perspectivas económicas para la región de Latinoamérica, el funcionario del FMI reiteró que México junto con Centroamérica y el Caribe tienen las mejores expectativas en la región.
Las proyecciones sobre México han disminuido desde octubre del año pasado porque la producción petrolera es menor trimestre a trimestre y hace que el sector minero sea un lastre para el crecimiento del país y sus exportaciones.
Robert Rennhack, subdirector del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, precisó que para México este año la expectativa es un crecimiento del PIB de 2.4 por ciento en 2016 y de 2.6 en 2017.
"El crecimiento será más bajo de lo previsto, pero creo que las reformas avanzan en la dirección correcta, con beneficios en las telecomunicaciones, la baja en precios de electricidad, etc. Las reformas están bien orientadas pero también tienen en contra las condiciones de la economía mundial; sin embargo, son de largo plazo y necesitamos tiempo para ver resultados", apuntó Rennhack.
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