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La nueva reforma energética debe buscar la manera de eliminar los elementos que generan una "burocracia lastimosa", lo cual amarra a la industria de la refinación, a fin de hacer más ágil y productiva, sostuvo el director general de Pemex Refinación, Miguel Tame Domínguez.
Al participar en el XIX Foro de Avances de la Industria de la Refinación, organizada por el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), destacó que Pemex Refinación es la subsidiaria más compleja de Petróleos Mexicanos, ya que se realiza a su interior desde el transporte de crudo hasta sus procesos de transformación.
Por ello, dijo, esta industria requiere de una especial atención para lograr su sustentabilidad, que está basada en la diferencia entre el costo de los productos finales y el costo del crudo.
Durante su ponencia "Estrategia y principales proyectos de Pemex Refinación", resaltó la necesidad de hacer más eficiente a esta industria, la cual, dijo, empezó con el proceso de modernización y reconfiguración de tres refinerías: la de Cadereyta, la de Ciudad Madero y la de Minatitlán, que cuentan ahora con procesos de coquización.
Asimismo, el funcionario manifestó su preocupación en torno a las expectativas del mercado de gasolina.
Dijo que el promedio de ventas es de 804,000 barriles diarios y "eso esperamos tener a finales del año, y con una expectativa de crecimiento de 2.8% nos encontraríamos con que en un periodo de 5 años tendríamos una demanda adicional de 120 a 130,000 barriles diarios".
Tame Domínguez advirtió que de no tomar medidas, México volvería a encontrase en un escenario como en 2010 cuando la importación de gasolina fue de hasta 50% del consumo nacional.
En ese sentido, la estrategia de Pemex para maximizar el valor económico y brindar sustentabilidad a la industria de la refinación está basada en la optimización de los activos existentes y el crecimiento a través de grandes proyectos.
También se incluyen las líneas de protección al medio ambiente y la seguridad, así como la modernización de gestión.
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