CIUDAD DE MÉXICO.- La recuperación económica ya dio inicio, esto a pesar de que el crecimiento del país fue menor al esperado en el primer trimestre del año, aseguró Francisco Funtanet, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), quien señaló que en función de esto, el sector espera ser uno de los más beneficiados, con un crecimiento de 3.3 por ciento.
"Para los industriales, economía e industria conservan una trayectoria ascendente que nos induce a pensar que ha comenzado la recuperación; pero, lo más importante, es que estamos trabajando para que el crecimiento sea mayor y se mantenga así durante mucho tiempo", expuso.
Sostuvo que aún con la reducción a 2.7 por ciento en la estimación oficial de crecimiento para este año, hay muestras de fortaleza macroeconómica y se empiezan a vislumbrar avances moderados en inversión y la actividad productiva.
El dirigente de los industriales precisó que "los signos vitales de la economía mexicana (finanzas públicas, tasas de interés, nivel de endeudamiento, el índice nacional de precios al consumidor y las reservas internacionales, entre otros) están bajo control".
En el ámbito macroeconómico, es conveniente subrayar que tras el repunte temporal de la inflación en el arranque del año y algunos episodios de volatilidad transitoria en los mercados financieros, el ambiente para los negocios se mantiene estable.
En el caso del sector industrial, Funtanet destacó el repunte de su producción tras acumular tres trimestres consecutivos a la baja, y en el primer trimestre del año la producción industrial aumentó 1.6 por ciento respecto al mismo lapso del año anterior, en lo que se perfila como el inicio de su reactivación.
Este avance permitió generar casi 167 mil fuentes de trabajo entre enero y marzo del presente año.
Sostuvo que aun cuando persisten riesgos que podrían debilitar el crecimiento de la economía mundial afectando el desempeño del sector exportador mexicano, su probabilidad de ocurrencia es cada vez menor.
Anticipa periodos de volatilidad en los mercados financieros, pero que serán de corta duración, y en consecuencia, se espera que la producción fabril cierre el año con un crecimiento de 3.3 por ciento, que le permitirá consolidarse como el más importante generador de empleos permanentes en el sector formal de la economía.
Asimismo, el presente año será el de la recuperación de la planta productiva, aunque a un ritmo menor al estimado a principios de 2014.