Reuters
El oro subió el viernes gracias a las compras físicas, pero no logró mantener mayores alzas vistas más temprano y el lingote anotó fuertes pérdidas por segunda semana consecutiva por liquidaciones de inversores impulsadas por meses de decepción por el desempeño del metal precioso.
El metal precioso cayó más de un 5% esta semana tras registrar su mayor pérdida diaria en dólares el lunes. El colapso del lingote tomó por sorpresa a muchos inversores veteranos que ven al oro como protección de sus carteras contra la inflación y otros riesgos del mercado.
El mercado se vio respaldado más tarde esta semana debido a que los consumidores adquirieron barras, monedas, pepitas y joyería tras la caída en el precio del metal amarillo.
Aún así, analistas afirmaron que podría haber una mayor debilidad, incluyendo más salidas desde fondos que cotizan en bolsa y posibles llamados por parte de los consejeros de la Reserva Federal a reducir la necesidad de nuevos estímulos monetarios.
Los operadores también vigilan de cerca las estrategias relacionadas con opciones en el mercado de futuros antes de la expiración de la opción del oro estadounidense la próxima semana.
El oro subió un 0.6% a 1,398.96 dólares la onza, luego de llegar a operar a 1,424.51 dólares la onza el viernes.
Los futuros estadounidenses del oro a entregar en junio treparon en 3.10 dólares, a 1,395.60 dólares.
El oro también se vio impulsado después de que Fitch Ratings se convirtió en la segunda gran agencia internacional que despojó a Gran Bretaña de su máxima calificación crediticia.
Aún así, el lingote anotó una pérdida de 2 semanas de más de un 11%, su mayor declive en ese período desde octubre del 2008.
El mercado cayó un combinado de 225 dólares el viernes y el lunes, que se compara con un rango total de transacciones de 260 dólares en el 2012. En lo que va del año, ha perdido alrededor de un 18%.
La plata cayó un 0.3% a 23.16 dólares.
El platino revirtió ganancias iniciales y bajó un 0.1% a 1,421.49 dólares.
El paladio avanzó un 1%, a 673 dólares.
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